Contra todo pronóstico -ya que las negociaciones que en los últimos días mantenían Coalición Canaria, Partido Socialista y Partido Popular estaban a años luz de llegar a buen puerto- el Parlamento de Canarias dio luz verde ayer por unanimidad a la proposición no de ley (PNL) destinada al reconocimiento y abono de las subvenciones a los solicitantes de las ayudas para la adquisición de vivienda usada que quedaron paralizadas en el año 2010.

Aunque el montante exacto de las ayudas se desconoce, puesto que se trata de 1.969 beneficiarios que tenían acceso a varias cuantías (1.000, 3.000 o 6.000 euros) en función de sus circunstancias, la consejera de Políticas Sociales, Inés Rojas, aseguró ayer estar en disposición de pagarlas, si no todas de una vez, sí una parte importante y el resto por fases, puesto que en el presupuesto de este año se han contemplado cinco millones de euros para el abono de líneas inconclusas del citado Plan de Vivienda.

Preguntada por si podrá dejarlo todo listo para que los afectados puedan tener acceso a las subvenciones que les corresponden antes de que se acabe la legislatura, Rojas aseguró a la salida del pleno que esa es su intención, aunque la condicionó a que se pueda establecer con exactitud cuántos son los afectados, puesto que no solo quiere dar salida a los afectados por la compra de vivienda usada, sino también al resto de líneas inconclusas como son las de autoconstrucción.

Durante el debate de la PNL fue precisamente Inés Rojas una de las que más intentos realizó para que se llegara a un consenso entre los partidos, pese a que sus propios compañeros nacionalistas, y también los socialistas, tenían serias dudas de votar junto con el Partido Popular, aludiendo que lo que se debería hacer era una propuesta para que se liquidara la deuda a todos los solicitantes de las ayudas inconclusas y no solo a los de vivienda usada.

La postura de Rojas no extrañó, puesto que en la anterior sesión plenaria no solo había reconocido la precaria situación en la que se había dejado a los cerca de 2.000 afectados, sino que incluso les llegó a pedir disculpas por los "fallos de comunicación" habidos con su departamento y se comprometió a apoyar la PNL que iba a presentar el Partido Popular "en aras de que el compromiso no sea solo para este gobierno sino que quede también para el próximo", manifestó desde la tribuna de oradores.

Finalmente fue el diputado de Nueva Canarias Pedro Justo el que obró el milagro introduciendo una enmienda in voce cuando tanto CC como el PSOE ya habían manifestado su voto en contra de la propuesta "popular".

La modificación de Justo consistió únicamente en introducir las palabras "en concreto" en el texto elaborado por el PSOE para abonar la deuda con los solicitantes de las ayudas de vivienda usada y eliminar el segundo punto de la PNL, relativa a establecer en el próximo plan canario de vivienda una línea de actuación para el pago de las líneas inconclusas de planes anteriores.

La idea satisfizo al Partido Popular, que la aceptó y en cuestión de segundos CC y PSOE también, saliendo aprobada por la votación positiva de los 48 diputados presentes.

Encuentro tenso entre los afectados y las portavoces de CC y PSOE

Tras la aprobación "in extremis" de la PNL coincidieron en los pasillos los portavoces de todos los partidos con los representantes de la Plataforma de Afectados por la compra de Vivienda Usada que increparon a las diputadas de Coalición Canaria y el Partido Socialista por no haber aprobado la propuesta desde un primer momento y pretender retrasarla aún más./ maría pisaca