El índice de precios mundiales de los alimentos elaborado por la FAO cayó en febrero hasta los 179,4 puntos, el nivel más bajo desde julio de 2010, por las buenas perspectivas de producción y la debilidad de muchas divisas frente al dólar.

La Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) indicó hoy en un comunicado que los precios mundiales de los alimentos registrados en febrero descendieron el 1 % con respecto a enero pasado y el 14 % en comparación con febrero de 2014.

El experto de la organización en el mercado de productos lácteos y ganado Michael Griffin subrayó la "perspectiva favorable de producción para diversos cultivos en 2015" y "las fuertes reservas para la mayoría de los cereales".

Además, consideró que esa caída del precio de los alimentos también se debe a la "continuada debilidad de muchas divisas frente al dólar estadounidense, que parece que continuará".

El índice de precios de los alimentos de la FAO se basa en un seguimiento del costo de los cinco alimentos básicos en el mercado internacional: cereales, carne, productos lácteos, aceites vegetales y azúcar.

Entre los alimentos, destacó la caída mensual del 4,9 % del precio del azúcar, lo que refleja el optimismo por las previsiones de producción en Brasil tras las últimas lluvias y el anuncio de la India de que va a subsidiar las exportaciones de esta materia para impulsar su venta en el extranjero, según la FAO.

El precio de los cereales también descendió el 3,2 % respecto a enero por las perspectivas de aumento de la producción de trigo, mientras que el precio del arroz se mantuvo más estable ya que el aumento de la producción de variedades aromáticas compensó la caída de otras distintas.

En cuanto a la carne, su precio se redujo el 1,4 % mensual, arrastrado por el del cordero como consecuencia de la fortaleza del dólar estadounidense frente al real brasileño y el dólar australiano.

De acuerdo con el comunicado, el precio de la carne porcina aumentó por primera vez en ocho meses, debido en parte por la decisión de la Unión Europea de ayudar a las empresas privadas encargadas de su almacenamiento.

Los únicos productos cuyos precios aumentaron en febrero respecto a enero fueron los lácteos (el 4,6 %), en parte por la llegada del fin de la temporada fijada para la producción europea, y el aceite vegetal (el 0,4 %).

En este último caso, la FAO explicó que los precios del aceite de palma crecieron de forma considerable como resultado de las recientes inundaciones en Malasia y un alza de los subsidios a los biocombustibles nacionales en Indonesia, si bien los de la soja siguieron cayendo por las perspectivas positivas de cosechas en Sudamérica.

Por otra parte, la organización de la ONU elevó sus estimaciones de la producción mundial de cereales en 2014 hasta los 2.542 millones de toneladas, sobre todo por el aumento de la producción en Argentina, Asia Central y Europa, lo que supone una cifra récord y un incremento del 1 % respecto a 2013.

Respecto a 2015, estimó que la producción de trigo en el mundo podrá ascender a 720 millones de toneladas, un 1 % menos que en 2014, reflejando una bajada esperada en Europa tras los altos índices del año pasado.

Un total de 2.475 millones de toneladas de cereales se utilizarán entre 2014 y 2015, de los que 878 millones servirán de alimento, mientras que las reservas de cereales habrán subido al final de las cosechas de este año hasta los 631 millones de toneladas, según las previsiones de la FAO.