Astrónomos de la Centro Harvard-Smithsoniano y la Universidad de Antioquia (Medellín-Colombia), han ideado un nuevo método, que sus descubridores han definido como "relativamente simple", para la identificación de anillos alrededor de planetas extrasolares (exoanillos).

Este método "rápido y novedoso", que ha sido publicado por ''Astrophysical Journal Letters'', está basado en la observación de transito (estudiar la sombra que deja el planeta a su paso por delante de la estrella que orbita) y en que un planeta anillado producirá una sombra más "profunda" sobre su estralla que la de un mundo normal.

Según apuntan los expertos, si un planeta del tamaño de Júpiter tiene un anillo, los astrónomos desdela Tierra van a pensar que el objeto es mucho más grande de lo que realmente es a su paso por delante de la estrella. Encontrar un planeta mucho más grande que Júpiter no es común, de hecho, sólo las estrellas enanas marrones son tan grandes.

Así, realizando una encuesta fotométrica, como la que realiza el telescopio espacial Kepler, los objetos que aparecen más grandes de lo esperado, son normalmente etiquetados como "falsos positivos". En este estudio apuntan que estos casos se deberían empezar a catalogar como "mundos anillados", porque la mayoría lo serán.

Pero existe una segunda posibilidad. Los tránsitos planetarios tienen una gran cantidad de información, no sólo sobre el planeta, sino de la propia estrella. Los científicos defienden que se se combina la profundidad de tránsito (que depende del tamaño de la estrella) y la duración del tránsito (que depende de la velocidad orbital y por lo tanto en la masa estelar), se puede estimar la densidad de la estrella.

Esta densidad estelar basada en tránsito podría compararse con otro tipo de técnicas, como la asterosismología por ejemplo. Si no coinciden, algo está mal en las suposiciones sobre el planeta o su órbita.

Pero los astrónomos ha reconocido que la identificación de los anillos con este nuevo método no es suficiente para reclamar el descubrimiento y confirmación de un exoanillo. Pero defienden que, con estos métodos se puede crear una base de datos e, incluso, clasificar aquellos exoanillos candidatos para ser estudiados más a fondo en un futuro.

Recientemente, un grupo de científicos, liderado por Matt Kenworthy del Observatorio de Leiden y Erik Mamajek de la Universidad de Rochester, anunció el descubrimiento de un enorme disco que orbita un planeta ''Super-Júpiter'', conocido como J1407b. Pasada la excitación inicial, los expertos se han puesto a despejar las dudas sobre este disco y cuál puede ser su origen o composición.

Los anillos son comunes en el Sistema Solar. Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno tienen anillos de diferentes tamaños. Incluso los objetos más pequeños, tales como asteroides y núcleos cometarios, podrían tener sus propios anillos. La búsqueda de planetas anillados más allá del Sistema Solar es tan natural como la búsqueda de las lunas y los campos magnéticos, otros dos fenómenos comunes asociado con los planetas.