UN AUTÉNTICO pulso entre la naturaleza y el ser humano. Así coinciden en definir la edición de este año de The North Face Transgrancanaria 2015 muchos de los corredores, miembros de la Organización y medios de comunicación. Un pulso sin piedad, al límite. Pues además de las dificultades que de por sí presentaban los recorridos de las cinco modalidades de carrera –más largos que años anteriores al finalizar en el Centro de Convenciones de ExpoMeloneras–, la naturaleza se alió con otros elementos para aumentar su fiereza. Sin embargo, ni el contraste extremo de temperaturas, de frío a calor en pocos kilómetros; ni el viento; ni la calima densa, nada pudo impedir que el lituano Gediminas Grinius estableciera el nuevo récord de la prueba en 14:23:37 y que la catalana Nuria Picas revalidara título, con una marca de 16:53:27.
Ambos son los ganadores de la que sin duda ha sido la Transgrancanaria más exigente. Y no es una frase hecha para la galería, como tampoco es una exageración situar la prueba isleña entre las citas más prestigiosas y duras del planeta, enmarcada por segundo año en el Ultra Trail World Tour. Para muestra, las espectaculares imágenes que ha dejado la carrera y la retirada de muchos de los corredores de élite internacional, que con el palmarés sobre el papel partían como favoritos y Artenara hizo añicos, Demostrando que la Transgrancanaria no entiende de predilecciones.
Corredores de la talla de la americana Nikki Kimball, con victorias nada menos que en el Ultra-Trail du Mont-blanc, la Western States 100 Mile Endurance Run o en la Marathon des Sables; Joe Grant, campeón en 2014 de la White Mountains 100m; Bartoló, quien tras ganar la Advanced en 2014 quiso probar este año con la Transgrancanaria, e Iker Karrera, en un nuevo intento tras no poder finalizar tampoco en 2011. Además del corredor chino Yan Longfei, que llegaba como líder provisional del Ultra Trail World Tour y se retiró exhausto en El Garañón, dejando una de las imágenes más estremecedoras del fin de semana. Nombres que engrandecen, sin duda, la gesta lograda por Grinius y la marca con la que “cazó” a Sandes.
