Nuevos vestigios prehispánicos han sido descubiertos durante los trabajos de mejora realizados en el sendero de Buracas, en el municipio de Garafía, en La Palma, ha informado hoy la corporación insular palmera por medio de un comunicado.

El inspector y jefe de sección de Patrimonio del Cabildo de La Palma, Jorge Pais, explica en el comunicado que se han encontrados cazoletas de tamaños mediano y pequeño, bastante profundas, que estaban intercomunicadas por canalillos que, en su mayoría, habían desaparecido.

Jorge Pais destaca que lo más sorprendente de todo, y hasta el momento único en la etapa prehispánica palmera, es el hallazgo de un gran canalón de más de cuatro metros de largo, uno metro de ancho y unos 80 centímetros de profundidad, ubicado a los pies de los canalillos y cazoletas.

El continuo deambular de los miles de turistas que visitan la zona arqueológica de Buracas, el fuerte desnivel que se debe salvar y el uso de troncos de pino hicieron que el sendero se deteriorase, se señala en el comunicado.

Las cazoletas y canalillos son conjuntos que se suelen encontrar sobre rocas de superficie más o menos plana.

Su disposición es de tal forma que las cazoletas suelen estar comunicadas a través de los canalillos, de manera que cualquier líquido que se vertiera en una de las cazoletas se fuese distribuyendo a las demás.

Al parecer habitantes prehispánicos de las islas usaban ese sistema para recoger el agua de lluvia o de nacientes próximos, aunque también se cree que se usaran para verter leche, un ritual mágico con el que se demandaba la llegada de la lluvia.

Las consejerías de Cultura-Patrimonio Histórico y Medio Ambiente del Cabildo de La Palma, que dirigen María Victoria Hernández y Nieves Rosa Arroyo, respectivamente, han informado del hallazgo.