Ya lo advirtieron los miembros del comité de empresa de la Consejería de Políticas Sociales del Gobierno de Canarias y también el Diputado del Común, pero probablemente nadie conocía la magnitud del atasco que se está registrando actualmente en el Centro Base en lo que a tramitación de expedientes se refiere.

Según ha confirmado este periódico directamente con los trabajadores del mencionado departamento, a día de hoy son nueve mil personas las que están en lista de espera para ser atendidas por alguna cuestión relacionada con la discapacidad.

Eso se traduce en que decenas de armarios del servicio están repletos con los expedientes de los ciudadanos que esperan a ser llamados, bien para tramitar o renovar el grado de minusvalía, bien para tramitar o renovar una Pensión No Contributiva (PNC), o bien para solicitar o renovar la tarjeta de aparcamiento especial para personas con discapacidad o movilidad reducida.

"Hay montañas y montañas de papeles", explican los trabajadores, que se quejan de que, "para semejante volumen de trabajo, la plantilla prevista sea solo de 20 trabajadores".

"Estas 9.000 son solo las solicitudes que están en lista de espera, pero expedientes vivos hay 98.000 entre tarjetas de aparcamientos y solicitudes para el reconocimiento del grado de minusvalía, bien por tratarse de una primera solicitud o por ser una revisión del grado que ya se tiene. En cualquier caso, son expedientes que están abiertos a cualquier trámite", detalla uno de los funcionarios.

Este mismo trabajador pone como ejemplo el caso de cualquier persona que, incluso teniendo ya reconocido el grado de minusvalía o una PNC, necesita certificados de actualizaciones, lo que obliga al personal a tener ese expediente disponible y abierto, no archivado.

"Realmente, muy pocos se archivan definitivamente, casi siempre es cuando el beneficiario fallece, y aún así hay que dejar los papeles a mano un tiempo, por si acaso", explican.

Hace menos de un mes, el comité de empresa de la Consejería de Política Social del Gobierno de Canarias denunciaba que las personas que estaban siendo atendidas en ese momento, para ser valoradas y obtener un reconocimiento de minusvalía por primera vez, habían presentado su solicitud, como pronto, en el mes de septiembre del año 2013, es decir, hacía un año y medio, y las que se han sometido a una revisión, estaban esperando durante dos años y medio.

A su juicio, la causa no es otra que el déficit crónico de personal que arrastra este servicio adscrito a la Consejería de Política Social del Gobierno de Canarias desde hace años.

"La plantilla del Centro Base es la misma que cuando se creó hace 20 años y la demanda se ha duplicado y sigue en aumento", explica el secretario del comité de empresa de la Consejería, Miguel Ángel Vargas.

Y es que el número de ayudas o beneficios que tienen las personas con discapacidad ha aumentando de forma notable, pero para obtener una PNC por invalidez, servicios de la ley de dependencia e incluso bonificaciones o exenciones fiscales necesitan contar con el grado de minusvalía.

"Los trabajadores no dan para más y no pueden con la carga de trabajo que tienen. Si el trabajo sale adelante es por su dedicación, porque son conocedores de lo importante que es este reconocimiento para las personas que lo solicitan", afirma Vargas, que no duda en acusar al Gobierno de Canarias, y más concretamente a Coalición Canaria, de no haber tomado ninguna medida en este tiempo para mejorar la situación.