La Policía de Baltimore (EE.UU.) vinculó hoy el inicio de las protestas violentas que se saldaron con varios agentes heridos e importantes daños materiales con algunos de los adolescentes que acuden a los institutos de la localidad.

En una rueda de prensa, el jefe de policía de Baltimore, Anthony Batts, indicó que, según la información de la que dispone el cuerpo, los disturbios fueron organizados "principalmente" por estudiantes de institutos locales.

"Una buena parte (de los manifestantes) salieron directamente de los institutos. Se trata de jóvenes adultos de 15, 16 y 17 años. Saben diferenciar lo que está bien de lo que está mal", dijo Batts.

"Creían que era divertido tirar bloques de hormigón a los policías. Ojalá hubiese habido más padres que se hubiesen ocupado de sus hijos esta noche", lamentó el jefe de policía.

Batts confirmó que quince agentes resultaron heridos, "seis de ellos seriamente", aunque aseguró que todos ellos se van a recuperar.

"La situación se está calmando de forma lenta pero segura", concluyó Batts.

Durante las protestas se han realizado 27 detenciones, y se han registrado múltiples destrozos materiales como la quema de vehículos y de una tienda, así como saqueos en varios comercios.

Por otro lado, la familia de Freddie Gray, el joven negro que murió cuando estaba bajo custodia policial y cuyo caso desencadenó las protestas violentas, hizo un llamamiento a la calma y censuró los disturbios en la ciudad.

"Quiero justicia para mi hijo, pero no quiero que se haga de esta manera", indicó Gloria Darden, madre de Gray, en un evento religioso celebrado por la familia en una iglesia local.

"No estoy de acuerdo con las manifestaciones violentas, Freddie no era una persona violenta", dijo la hermana del fallecido, Fredericka Gray.

El gobernador de Maryland, Larry Hogan, declaró hoy el estado de emergencia en Baltimore y movilizó a la Guardia Nacional (una fuerza militar de reserva) para hacer frente a la violencia en la ciudad.

Por su parte, la alcaldesa de Baltimore, Stephanie Rawlings-Blake, declaró un toque de queda en la ciudad que se empezará a aplicar a partir de las 10 de la noche del martes y que se prolongará durante una semana entera.