El Grupo Santander obtuvo un beneficio neto de 1.717 millones de euros entre enero y marzo de 2015, el 32 % más que en el mismo periodo del año pasado, debido al incremento de los ingresos por la mayor actividad comercial, entre otras razones.

En un comunicado remitido hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el banco explica que esta mejora del beneficio permitió elevar en 1,1 puntos la rentabilidad sobre recursos propios tangibles (ROTE), que se situó en el 11,5 %.

El crédito a la clientela creció el 14,3 %, hasta los 793.965 millones de euros, lo que significa que el saldo de créditos aumentó en algo más de 100.000 millones en un año.

Según explica la presidenta del Grupo, Ana Botín, "el fuerte incremento del crédito refleja el compromiso del banco con nuestros clientes", y recuerda que "en enero, cuando ampliamos capital, ya dijimos que queríamos aprovechar la oportunidad de crecimiento orgánico que preveíamos en nuestros principales mercados".

Esta cartera crediticia cerró marzo con una mora del 4,85 %, con un descenso de 0,67 puntos en un año, gracias, sobre todo, a la mejora de ese indicador en Brasil, Reino Unido y España, donde bajó 0,36 puntos en comparación interanual, y quedó situada en el 7,25 %.

Los depósitos de la clientela aumentaron el 10,8 % y sumaron 687.362 millones de euros a cierre de marzo, mientras que los activos totales del Grupo sumaron 1,36 billones de euros, el 17 % más.

El beneficio creció en nueve de los diez mercados clave para el Grupo: en España, alcanzó los 357 millones de euros, con un incremento del 1 % en su cartera crediticia especialmente activa en empresas ( %) y particulares ( %).;

En Reino Unido, el beneficio atribuido se situó en 477 millones de euros, con un incremento del 5 % en créditos y del 3 % en recursos.

En Brasil, su mercado latinoamericano más potente, el beneficio atribuido alcanzó 516 millones de euros, con un incremento del 17 % del crédito y del 12 % de los recursos.

En cuanto a los principales márgenes de la cuenta, el de intereses -que mide los ingresos- se situó en 8.038 millones de euros, el 15 % más que un año antes, en tanto que el bruto -que añade las comisiones- ascendió a 11.444 millones tras crecer el 13%.

Tras restar los costes de explotación, el margen neto (el resultado de explotación recurrente o beneficio antes de provisiones) se situó en 6.067 millones, un 15 % más que en marzo de 2014.

El ratio de capital CET "fully-loaded", como se conoce en el argot al que incluye todos los futuros requerimientos de Basilea III, se situó en el 9,7 %.