De momento, a pesar de los agoreros y de tantos mensajes apocalípticos, no parece que se haya encontrado mejor fórmula que las ferias del libro para agrupar en un mismo espacio público a editores, agentes, distribuidores, creadores, lectores, curiosos, etc.

Hubo un tiempo en el que estas citas representaban aquel encuentro anual que se esperaba con ilusión y también con perspectivas de "encuadernar" buenos negocios; un momento en el que "florecían" las novedades alrededor de un mundo que no paraba de contar experiencias, impresionaba y entusiasmaba, y que hasta acertaba a reescribirse con una cuidada caligrafía, identificándose desde lo profesional, pero sin perder su esencia original: el sello de la creatividad humana.

El panorama editorial, el tono de voz y el pulso de la palabra se enfrentan, sin duda, a una evidente crisis de identidad. Ante este horizonte cabe plantearse: ¿Existe un futuro cierto para el papel? ¿Estamos abocados a desterrar los libros, convirtiéndolos en objetos de adorno, en favor de las tabletas? ¿Cómo se concebirán en un futuro las ferias del libro? ¿Y habrá ferias o desaparecerán tal y como las conocemos?

Hasta tanto se despejan algunas de estas incógnitas, las ferias del libro parece que continúan manteniendo un discreto encanto, al menos para la prensa y sobre ese cada vez más reducido grupo de personas que siguen rindiendo un culto prácticamente reverencial a las publicaciones en papel; también sostienen su funcionalidad como espacios abierto al diálogo y al conocimiento directo entre los autores con sus lectores...

Con todo, la creciente irrupción de lo digital y su influencia en diferentes ámbitos sociales provoca que persista el recitado que plantea un debate sobre el futuro del libro y su adaptación.

En Santa Cruz de Tenerife, desde hoy, jueves, y hasta el lunes, 4 de mayo, el parque García Sanabria acomoda sus anaqueles para acoger en diferentes espacios un programa que busca dignificar un panorama editorial.

Entre las firmas famosas que destacan en esta edición, la de Fernando Sánchez Dragó, que presenta su libro "La canción de Roldán. Crimen y castigo", o José C. Vales, premio Nadal 2015 con la novela "Cabaret Biarritz", que mantendrá una conversación con el público. Entre capítulo y capítulo, autores locales, talleres, encuentros...