Agentes de Policía Nacional adscritos a la Brigada Provincial de Policía Judicial detuvieron a un hombre, de 43 años de edad afincado en Tenerife y natural de Vitoria (Álava), por delitos continuados de hurto. Además, le constan antecedentes por hechos similares.

Con motivo de los controles rutinarios que lleva a cabo la Brigada Provincial de Policía Judicial en establecimientos dedicados a la compra-venta de objetos de segunda mano, se detectó la venta de numeroso material de ferretería, así como aparatos electrónicos, tales como teléfonos móviles, tabletas o reproductores de música, entre otros. Todos los efectos estaban nuevos y en su embalaje original precintado. Siempre los llevaba a la tienda una misma persona, por lo que se iniciaron diferentes gestiones policiales.

Los investigadores pudieron determinar la procedencia de los mismos, comprobándose que no figuraban denunciados por las empresas propietarias de dicho material, que no se habían percatado de las sustracciones. Las sociedades efectuaron un completo inventario y confirmaron que estos habían sido sustraídos, pero no habían interpuesto denuncia, ya que desconocían la falta de los mismos, presentándose por parte de dos empresas sendas denuncias por material valorado en 40.000 euros en un caso y 12.000 en otro.

Una vez identificado al vendedor de todos los artículos intervenidos, en el transcurso de la investigación se pudo determinar que el mismo había sido gerente primero en una de las empresas, y director en la última, en la que trabajaba hasta que fue arrestado.

Dicha persona, al tener conocimiento de que la Policía Nacional había procedido a la intervención de todos los artículos que había vendido en los establecimientos de compra-venta de objetos de segunda mano, abandonó su puesto de trabajo encontrándose ilocalizable hasta el pasado día 21 de abril, en que fue detenido y trasladado a los calabozos de la Avenida Tres de Mayo, imputándosele en primera instancia un delito de hurto continuado a una empresa de efectos electrónicos.

El pasado día 23 de abril se trasladaron hasta Tenerife responsables de la empresa de ferretería, la cual ya había cerrado su sucursal en la isla, reconociendo los efectos intervenidos como suyos y procediéndose nuevamente, el día 28 de abril, a la detención del exgerente de dicha empresa, por otro delito de hurto continuado.

Tramitados los oportunos atestados policiales, el detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial, que decretó su libertad con cargos.

El Servicio fue desarrollado por policías adscritos a la Sección Técnica de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Santa Cruz de Tenerife.