El Ayuntamiento del Puerto de la Cruz ha aumentado y reforzado los controles en la calle Tegueste, en Punta Brava, debido a una aceleración del agrietamiento de la vía que se ha detectado en los últimos días. El riesgo de derrumbe se agrava. La alcaldesa portuense, Sandra Rodríguez (CC), y técnicos de Urbanismo y de la empresa responsable del estudio geológico del acantilado, visitaron ayer a mediodía la zona afectada, de la que ya se ha desalojado a tres familias.

Los técnicos realizaron nuevas mediciones y capturaron imágenes de las grietas, además de analizar la composición de los materiales.

"Debemos permanecer tranquilos. Los técnicos realizan un seguimiento diario de toda la zona, incluso varias veces al día, para ir detectando cualquier tipo de anomalía. Trabajamos con expertos para determinar el origen, si bien lo complicado es detectar y calcular el tamaño de las cavidades que no están visibles", explicó Sandra Rodríguez.

Rodríguez anunció un nuevo encuentro con el equipo de geólogos y geofísicos esta misma semana debido del aceleramiento producido en las últimas horas.

Según los datos previos sobre el origen del hundimiento de la vía, se debe a dos acciones naturales: el movimiento natural del acantilado y la creación de nuevas cavidades por la acción del mar.