La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha urgido a aprobar una política común de asilo en la UE y un único sistema de acogida de las personas que son rescatadas en el Mediterráneo, a través de una campaña que exige a Europa que no se quede "UErfana" de derechos humanos.
Con esta iniciativa, que se puede ver desde ayer en redes sociales y medios de comunicación, CEAR quiere movilizar a los ciudadanos para que suscriban su apoyo a estas propuestas, que serán entregadas en instituciones europeas y en el Parlamento español para "exigir soluciones reales" al drama de los inmigrantes.
Abre la campaña una foto impactante del fondo del mar, del mismo color que la bandera europea, de la que sustituye cada una de las estrellas por cadáveres de personas que han perdido la vida en su intento de llegar al continente europeo. "No permitas que la Europa de los valores se hunda en el Mediterráneo", reclama esta iniciativa que apela a la responsabilidad de los estados para "plantarse" y establecer vías legales y seguras que garanticen la vida de los inmigrantes.
Según CEAR, la propuesta de la UE de fijar cuotas para la distribución de demandantes de asilo dentro de los estados es insuficiente. "Exigimos un compromiso firme y adecuado a la realidad y a las posibilidades de la UE, que debe estar comprometida con la defensa de los derechos humanos", aseguró la secretaria general de CEAR, Estrella Galán.
Galán recordó que el 80% de los rescatados en el mar son potenciales refugiados, muchos de ellos familias que huyen de países con conflictos bélicos o que sufren persecución por diversos motivos. Por ello, estima que "hay que dar una respuesta desde el derecho de asilo y el principio de no devolución". "Debe fijarse un sistema común de acogida en la UE, con los mismos estándares, independientemente del lugar donde cada persona pida su asilo, porque ahora cada país aplica unos criterios", sostuvo Paloma Favieres, jurista de CEAR.
La organización pide una política global y realista de asilo y migración donde se dé prioridad a la dignidad humana y a los derechos humanos, y en la que, además del rescate, se contemplen medidas de acogida "para el día después", ajustadas a la capacidad de los estados miembros.
"No podrá haber un reparto equitativo de estas personas mientras no funcione un sistema común de asilo y unas condiciones iguales de acogida", advirtió la letrada.
Para facilitar el trámite del asilo y eliminar trabas, plantean la intervención de las embajadas y una política común de visados. Durante la presentación de la campaña, el profesor de Derecho Internacional Público de la Universidad de A Coruña Jorge Quindimil admitió que es difícil exigir a los países el cumplimiento de sus responsabilidades internacionales, a las que están obligados por las leyes y directivas.
En concreto, los estados deben prestar auxilio a toda persona que se encuentre en peligro en el mar, no devolverles a países donde su vida corra peligro, satisfacer sus necesidades básicas y facilitarles un transporte seguro.