El Parlamento de Andalucía ha rechazado por tercera vez la investidura de la candidata socialista, Susana Díaz, como presidenta de la Junta, al recibir 62 votos en contra del PP, Podemos, Ciudadanos e IU, frente a 47 a favor del PSOE.

A diferencia de las dos ocasiones anteriores, el presidente de la Cámara regional, Juan Pablo Durán, no ha anunciado una nueva fecha para la votación, con lo que previsiblemente se producirá después de las elecciones municipales del 24 de mayo.

El presidente de la Cámara, tras el recuento de votos, ha suspendido la sesión anunciando, en virtud del artículo 118.3 del Estatuto de Autonomía y 138.7 del reglamento de la Cámara, que "se convocará una nueva votación que se realizará en la fecha que será indicada por la presidencia".

El Estatuto de Autonomía de Andalucía establece, en su artículo 118.3, que se tramitarán sucesivas propuestas en caso de que el candidato no consiga la mayoría simple y "si, transcurrido el plazo de dos meses a partir de la primera votación, ningún candidato hubiera obtenido la mayoría simple, el Parlamento quedará automáticamente disuelto y el Presidente de la Junta en funciones convocará nuevas elecciones".

La votación de hoy, como las dos anteriores, se ha producido por llamamiento comenzando por el diputado cuyo nombre ha sido sacado a suerte, y que en esta ocasión ha recaído en el portavoz del grupo parlamentario popular, Carlos Rojas, uno de los miembros de la delegación del PP que ha participado en las negociaciones con el PSOE, hasta ahora infructuosas, para la investidura de Díaz.

La Cámara andaluza, si así lo indicara la Presidencia de esta institución, puede convocar nuevas votaciones hasta el 5 de julio, como fecha tope, que es cuando se cumplen los dos meses desde la primera votación.

Todo parece indicar que la próxima votación no se producirá hasta después de los comicios municipales del 24 de mayo, salvo que se produjera antes un acuerdo para facilitar la investidura, lo que parece complicado dadas las posiciones distantes entre los partidos de la oposición y el PSOE.

Susana Díaz había manifestado, previamente a la votación, que si hay que ir "a elecciones, se irá a elecciones".

Durante su intervención ante la reunión del grupo parlamentario socialista previa al inicio de una nueva sesión del Pleno de la Cámara, Díaz ha manifestado que con el hecho de que ella no sea investida presidenta no pierde el PSOE-A y ganan otros, sino que "pierden" los andaluces.

Ha indicado que en Andalucía se está viviendo una situación "surrealista" que empieza a rozar "el ridículo". Ha manifestado que el PP-A no se ha recuperado del resultado del 22 de marzo; Podemos está mirando de reojo a Ciudadanos y viceversa, e Izquierda Unida no se sabe ni a dónde mira, y mientras los andaluces esperando y "pagando el oportunismo político de algunos que pretenden sacar rédito el 24 mayo", cuando se celebran elecciones municipales y autonómicas en otros territorios.

Ha querido dejar claro que no va a permitir que el 24 de mayo Andalucía sea "trueque" de nadie ni un "cromo que se vaya a intercambiar con nadie". Ha manifestado que ella no sabe lo que va a pasar en otros territorios, pero sí que en Andalucía va a ganar el PSOE y ha advertido de que no va a permitir que ningún partido piense que esta comunidad va a ser un "cromo que van a intercambiar" porque esta tierra, afortunadamente, un 28 de febrero, se ganó su autogobierno.

"Por aquí no voy a pasar y quien piense en eso, se está equivocando y si siguen pensando en eso después del 24 de mayo, si hay que ir elecciones, se irá a elecciones", ha indicado Díaz, quien ha recalcado que si alguien no teme ir a elecciones son el PSOE-A y ella.

Ha señalado que los andaluces son sabios y nos tendremos que presentar ante los ciudadanos y decir quién ha estado pensando en la responsabilidad y en los problemas de la gente y quién ha estado pensando en sus intereses y de su partido.