Una de cada 15 personas que revisa sus lunares padece algún tipo de cáncer de piel, según datos de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), que ayer presentó una campaña de prevención solar que recorrerá toda la costa española para sensibilizar de los riesgos para la piel de exponerse al sol.

La campaña "Skinchecker", que se presenta por segundo año consecutivo por la AECC, la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) y los Laboratorios La Roche-Posay, se emplaza en un autobús que recorrerá más de 70 ciudades españolas explicando a la población cómo deben revisar sus propios lunares y los de sus familiares o amigos para detectar cualquier anomalía en la piel.

"Los españoles conocemos más los riesgos del sol y sabemos que existen, pero todavía pensamos que el sol es algo bonito que nos hace estar más sexis y guapos, y muchas veces no nos protegemos adecuadamente", indicó la directora científica de La Roche-Posay, Leonor Prieto.

De hecho, según el estudio Ipsos 2015, que recoge datos de España y de 22 países más respecto a la actitud frente al sol y a los riesgos asociados a la exposición solar, el 80 % de españoles considera que estar bronceado les hace sentir atractivos, un 8 % más que en el resto del mundo (72 %), y el 77 % cree que una persona bronceada parece más saludable (67 % en el resto del mundo).

Según el informe, cada año se diagnostican 200.000 nuevos casos de melanoma en todo el mundo, de los cuales el 90 % son curables si se detectan en una etapa precoz.

Por ello, es importante que la población revise sus lunares con frecuencia, y la campaña propone el "Método ABCDE" utilizado en dermatología, que tiene en cuenta cinco variables en los lunares sospechosos.

La asimetría (A), que se observa cuando un lunar no tiene la típica forma ovalada; los bordes (B), que pueden ser irregulares o con "picos"; el Color (C), que puede variar del marrón, al rojo o blanco en un mismo lunar; el Diámetro (D), que en lunares que resultan sospechosos supera los 6 milímetros; y la Evolución (E), cuando el lunar cambia rápidamente de tamaño o forma.

las claves

Las lesiones malignas en la piel se pueden detectar precozmente si se está atento a cinco pautas básicas y se observa con frecuencia la asimetría de los lunares, la estabilidad de sus bordes, las variaciones en su color, cambios en su diámetro, si cambian de tamaño o forma y también si producen molestias como dolor o picor. Hay que revisar todo el cuerpo.

Sigue faltando más protección frente al sol

Y es que aunque en España el 90 % de la población se proteja del sol de manera puntual, según el estudio sólo un 22 % de los españoles se protegen a diario, aunque supera la media mundial, que se reduce a un 18 %.

"Todas las zonas de la piel son muy sensibles - insiste la directora científica de La Roche-Posay, Leonor Prieto-, aunque los melanomas suele aparecen en el tronco, en el caso de los hombres, y en las piernas, en las mujeres: las zonas que cada sexo suele exponer más al sol".

El autobús de la campaña, que recorrerá todo el litoral mediterráneo, andaluz y cantábrico hasta mediados de julio, cuenta con una plataforma digital que permite al usuario aprender cuáles son los lunares sospechosos que deben ser analizados, e incluso un cuestionario que revela cuál es el mejor tipo de protección solar según el color de la piel, pelo u ojos de la persona.

El melanoma es el noveno cáncer más común en Europa, y es el único que se puede prevenir y diagnosticar con un simple vistazo de un dermatólogo, aunque según ha explicado Leonor Prieto, este puede desarrollarse durante unos 20 años.

El cáncer de piel aparece cada vez más entre gente joven porque desde pequeños se exponen al sol. Por otro lado, las cabinas de bronceado provocan un 20% más de riesgo a los menores de 36 años que se exponen a ella, por lo que gente cada vez más joven acude al dermatólogo.