Acumulan muchas experiencias alrededor del timple, pero son conscientes de que los episodios más interesantes de sus carreras artísticas aún no se han escrito. El conejero José Vicente Pérez González (1983) y el majorero Víctor Estárico (1988) protagonizan hoy en la Ciudad de los Adelantados una cita musical que combina tradición y vanguardia. "Los desafíos del timple" es la excusa perfecta para el reencuentro de dos intérpretes que están impulsando -junto a otros jóvenes creadores del Archipiélago- una revolución cultural que tiene como elemento común una curiosidad sin límites. "Estar en el teatro Leal es una gran oportunidad para mostrar cómo van evolucionando los lenguajes musicales que se han adaptado al sonido del timple", asegura Pérez González sobre una aventura que esta noche afrontará en compañía de Roberto Gil (guitarra) y David Lutzardo (percusión). "Haré un programa centrado en el folclore de Lanzarote, con alguna que otra incursión en América Latina y, por supuesto, algo más actual", avanza un timplista que no discute el carácter innovador de este instrumento. "El respeto por todo lo que se hizo en el pasado no se va a perder, pero hay que seguir evolucionando en una línea de trabajo similar a lo que ocurrió con la guitarra", incide José Vicente a su versatilidad.
Víctor Estárico -en la imagen superior- comparte los planteamientos del lanzaroteño sobre las "amplitud de miras que hay que tener con la música que se escriba para ser interpretada con un timple. José Antonio Ramos ya nos enseñó que el jazz era una posibilidad más, Benito Cabrera también ha realizado una apuesta más sinfónica y Totoyo Millares simboliza la tradición... En ese sentido, creo que este instrumento está preparado para ir en busca de muchos desafíos armónicos", defiende un tocador que en Aguere contará como aliados con Besay Pérez (solista) y Israel Espino (guitarra). Su propuesta, al igual que la de su amigo José Vicente, tocará tres vértices claramente diferenciados: folclore canario, música popular de países como Guatemala o Paraguay y, por supuesto, algo de innovación. Ambos tuvieron el primer contacto con el timple en torno a los ocho años, los dos quieren buscar en un futuro su primera aventura discográfica y tanto el lanzaroteño como el conejero se posicionan como defensores de una corriente creativa que, a pesar de que aún tiene que dar algunos pasos contundentes en el apartado de la composición, está asumiendo riesgos como los que se van a escuchar hoy en las instalaciones culturales de la calle Obispo Rey Redondo de La Laguna. "Los desafíos del timple ya son una realidad", concluyen.
Concierto: 22 de mayo.
Lugar: Teatro Leal de La Laguna.
Hora: 21:00.