De regreso a Madrid, donde reside, ligera de equipaje pero acarreando entre sus enseres de viaje el reconocimiento a su trabajo "Latente", premiado este fin de semana como mejor espectáculo de nueva creación en la Feria Umore Azkoa de Leoia (Vizcaya), la directora, bailarina y actriz tinerfeña Paula Quintana (Santa Cruz de Tenerife) adopta una merecida posición de reposo.

Con las sensaciones del galardón todavía frescas y casi pegadas al cuerpo, deja bien claro que no se considera entre ese grupo de personas a las que un premio nubla el sentido, pero como cualquier hijo de vecino lo valora, por lo que representa en cuanto a "confirmarte de alguna manera que estás yendo por el camino correcto", dice.

Pero más allá de personalismos, destaca sobre todo lo que este reconocimiento supone de refuerzo y estímulo para las personas que integran la compañía, un equipo entregado y cómplice. "Me alivia por ellos", y se refiere al conjunto, pero poniendo el acento en gentes como Carlos Pedrós, autor de los textos, o Juan Carlos Simarro, compositor musical. Ella, por su parte, se aleja de los focos y sostiene que un premio "no me va a cambiar la vida".

Lo cierto es que tras un bagaje profesional cuajado de reconocimientos y experiencias, desde que se lanzó a la aventura de montar su propia compañía, un gesto ciertamente épico, Paula Quintana admite que acaso dio este paso de "una manera casi inconsciente", pero defiende que por encima de reflexiones y análisis realistas, "me podían las ganas de contar cosas, de crear, estar cerca del público".

La evolución que ha experimentado desde su primer montaje en solitario, "Pieles", con el que propone una fusión de estilos, hasta la propuesta de "Latente", donde la danza se acompaña de otros lenguajes como son textos y música originales, la artista percibe que se han ido sucediendo "muchos cambios".

Con "Pieles" ha participado en importantes salas y festivales, tanto nacionales como internacionales, entre los que destaca el Flamenco London Festival, Sadler''s Wells Theatre de Londres, el Between the Seas Festival de Nueva York y el FIT Madrid en el Círculo de Bellas Artes de la capital.

Ahora, con "Latente", transmite la experiencia de trabajar en "condiciones de precariedad", una de las razones que explica esa economía de medios que el espectador puede llegar a percibir en este montaje , donde se asiste a una puesta en escena que quizá pueda resultar "mínima", con algunos efectos de iluminación y apenas unos elementos más: una tienda de campaña, cuadrados, sombras... "No podemos permitirnos escenografías ambiciosas ni por supuesto complejidades", precisa esta creadora, quien agradece la funcionalidad como una ventaja que facilita la "movilidad" de la pieza y su representación.

Las próximas citas que aparecen señaladas en su calendario sitúan a la tinerfeña en el Festival Cádiz en Danza, el 9 y 11 de junio, con un extracto de la obra "Latente" ; la pieza "Pieles" viaja con destino a Murcia el 20 de junio, mientras con puntas avanza hacia su nueva creación, "Amarga Dulce", un proyecto que conjuga la danza con el teatro clásico, cuyo estreno se ha programado para el próximo 16 de julio, dentro del programa del prestigioso Festival Internacional de Teatro Clásico Almagro Off 2015, coincidiendo con el 400 aniversario de la segunda parte de "El Quijote".

A este último proyecto, inspirado en la figura femenina de Dulcinea del Toboso -personaje ideado por la pluma del ingenioso Miguel de Cervantes-, se refiere como "otra piscina a la que nos hemos lanzado", pero asumiendo el desafío que representa una creación propia.

Aunque residente en Madrid desde hace un tiempo, la bailarina tinerfeña no considera que resulte imprescindible salir de las Islas para desarrollar espectáculos de nivel. Sin embargo, también entiende que en el proceso evolutivo de cualquier artista también resulta necesario "abrir la mente y compartir experiencias y sensaciones". En opinión de Paula Quintana, el hecho de mantenerte en "casa" puede llegar a aislarte, con el inconveniente de "quedar atrapado en una burbuja. Más allá de ese círculo es posible encontrar multitud de alternativas y experiencias enriquecedoras".

Con todo, y a pesar de esa "ambientación" grisácea que suele acompañar los vaticinios sobre el sector cultural, Paula Quintana observa el futuro de las artes escénicas desde una perspectiva "esperanzadora", porque asegura con cierto tono de melancolía y un matiz de ironía que "ya no se puede caer más bajo".

No obstante, también expone que por encima de "partidos políticos de uno u otro color, de gobiernos y de ideologías", lo que se necesita verdaderamente es "recuperar a los públicos, enamorar a la gente". Con las elecciones aún vivas, Paula Quintana reivindica que creadores y actores debemos animar a la gente a rescatar el concepto de la cultura como algo propio e inherente al ser humano". Telón.

Paula Quintana

bailarina, directora y actriz