Tras romper la hegemonía del PSOE en El Rosario, que duraba más de tres décadas, Escolástico Gil, concejal electo y cabeza de lista de IR-Verdes, tiene la difícil tarea de formar gobierno. Descartados PSOE y Vecinos por El Rosario, debe poner de acuerdo a Sí se Puede y PP. Esta semana comienza a negociar.

¿Es doble la victoria del domingo?

La victoria de IR-Verdes ha sido inapelable después de 32 años de gobierno socialista. Y, además, le hemos ganado a Macario Benítez, que ha estado desde el primer minuto, casa por casa, en campaña, trabajando por una victoria que el pueblo le ha negado esta vez.

Además han ganado en La Esperanza.

Lo hemos superado ampliamente en el casco de La Esperanza y en las zonas limítrofes, donde él siempre ganó. Eso ha sido para mí de suma importancia. Los vecinos que siempre lo apoyaron a él y que ahora me han apoyado a mí han entendido que el alcalde de El Rosario, Macario Benítez, no ha sabido marcharse del ayuntamiento y de la política.

El PSOE ha pasado de una mayoría absoluta de nueve concejales a cinco. Más de 6.000 votos en contra. ¿Qué han hecho mal?

Algo habrán hecho mal. Por eso los vecinos piden cambio.

Ahora toca formar gobierno. ¿Cuál es la situación?

Esta semana empezarán los contactos para un cambio en El Rosario.

El sentir popular es que no se entendería un pacto de IR-Verdes con el PSOE. Es más, usted negó antes de las elecciones que hubiese un acuerdo preelectoral en ese sentido. ¿Sigue siendo válido ese argumento?

Sí. Las mentiras tienen las patas muy cortas. He sido injustamente tratado por el gobierno local y por otras personas que se han dedicado a mentir durante la campaña. (...)Las consecuencias de eso son que hay mucha distancia entre determinados partidos e IR-Verdes, mientras que con otros tenemos muy buenas relaciones (Sí se Puede y PP).

¿Se ve gobernando en minoría o confía en una mayoría estable?

Eso lo decidirán las reuniones que, a partir de esta semana, comenzaremos a tener con otras fuerzas. Esperamos llegar a buen puerto y buscar la solución que todos puedan compartir para llevar a cabo un cambio.

Si resulta investido alcalde, ¿cuál es la primera medida que piensa ejecutar?

El abastecimiento de agua en determinadas zonas y los problemas que ha habido en Radazul y Tabaiba en verano va a ser la primera papa caliente que nos vamos a encontrar. (...) Y de futuro próximo habría que buscar una solución más concreta que sería la interconexión de los depósitos de la zona baja para evitar este tipo de problemas. Sabemos que son cuestiones ambiciosas, pero se necesitan urgentemente.

¿Teme la herencia?

Es pública. No tenemos PGO, tenemos muchos problemas que determinados servicios, la gente dice que la zona alta está abandonada y que quieren otra forma de hacer política. Vamos a centrar nuestra política en la participación ciudadana y en llevar a cabo en el ayuntamiento las necesidades y las prioridades que los propios vecinos definan. Intentar gobernar para todos, hacer un cambio tranquilo y sin revanchismo, pero cambiando la forma de hacer las cosas.

El PGO ha sido uno de los principales asuntos en los que IR-Verdes ha apuntalado su oposición. ¿Cómo piensa afrontarlo?

Habrá que ver cuál es la situación real, las salidas posibles. Con determinados partidos hay ya parte de consenso para llevarlo a cabo. Será un plan consensuado con el resto de formaciones y serán escuchados también los vecinos.

El PP se antoja como llave de gobierno. ¿Son buenas las relaciones?

Las relaciones han sido siempre correctas en los plenos con ellos y con el resto de concejales.

Parece que, desde la noche del domingo, hay cierto temor de los trabajadores del ayuntamiento a una reducción de plantilla. ¿Pueden estar tranquilos?

Es otra leyenda del gobierno contra IR-Verdes. No tiene el Ayuntamiento de El Rosario dinero para despidos. No venimos con ánimo de revanchismo. Cumpliremos la ley y estaremos a la espera de que haya una sentencia, que es lo que cabe. (Se refiere a un conflicto relativo al personal que se inició tras una denuncia de CC. Está la instrucción terminada y falta que se celebre el juicio). (...) Pero no vamos a hacer locuras ni cosas que no se atengan a la legalidad.

También se comenta en el ayuntamiento que las máquinas no paran de destruir papeles en el consistorio.

Las leyendas urbanas dicen que llevan tiempo destruyendo papeles. Si es así, espero que no sean documentos necesarios para una buena acción de gobierno y para beneficiar al municipio.