"Esta puerta debe estar siempre abierta y la zona accesible para todos. Es lo que exigimos tanto usuarios como vecinos". Son palabras de Mercedes Semán, secretaria de la AV Cabo-Llanos, en referencia al estado "de abandono absoluto" que reina en el entorno del único acceso (sin pagar) a la playa del Parque Marítimo César Manrique de Santa Cruz.

"Hay una puerta -señala Semán- similar a la de antes en la entrada al muellito del Castillo Negro y todo alrededor está abandonado, sucio y con plantas secas hace tiempo. Un escalón alto impide pasar a personas mayores, gente que lleve algo para comer o un carrito de niño".

Semán ya fue clave para abrir este acceso porque "en su día me querían obligar a pagar la entrada. Yo amenazaba con la policía y terminaron por hacer esta entrada".

Solo hay otra posibilidad, pero "hay que dar toda la vuelta a la montaña que era el Lazareto. Antes, además, había unos perros abandonados y asilvestrados que ya se han llevado de allí".

Para esta vecina y usuaria, "detrás hay un intento de privatizar la zona. Ahí no habrá playa sino un solárium para el parque, según prevé el Plan Especial. Ahora en verano este espacio se llena porque hay pocas playas en Santa Cruz. Varias protectoras de animales pidieran una zona acotada para perros, pero no les hicieron caso. Parece que quieren echar a la gente de allí y luego alegar que la zona está abandonada para hacer lo que quieran".

Fuentes del ayuntamiento explicaron ayer que "esto ni ha sido ni es una playa sino una zona de acceso al mar en la que no tenemos competencias. Correspondería a Costas o, si tuviera parte del terreno, a la Autoridad Portuaria".

Reconocieron que "cuando el restaurante estaba abierto se acondicionaron los accesos como zona de servidumbre de paso, pero luego cerró y quedó así. Para que vuelva a abrir hay que aprobar el Plan Especial y luego adjudicar la concesión".

La campaña de verano en el parque será del 19 de junio al 7 de septiembre. Mañana o el lunes está previsto que comiencen las entrevistas con los seleccionados de entre las 2.500 personas que presentaron su currículo para optar a las 33 plazas ofertadas para trabajar: un taquillero, ocho socorristas, 21 de mantenimiento, una para limpieza y dos en la enfermería.

Abandono también en la antigua discoteca

Muy cerca del acceso a la playa se encuentra esta discoteca que en su día, con diferentes nombres, estuvo entre las más transitadas por los amantes de la marcha de Santa Cruz y de toda la Isla. Su entorno también hace tiempo que necesita ser adecentado./ jesús adán