China confirmó hoy que el primer caso en el país de Síndrome Respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV) o nuevo coronavirus, un hombre surcoreano de 44 años que viajó a Hong Kong y a la vecina provincia de Cantón (sur del país) por negocios, se encuentra en estado grave, según dijo hoy la agencia Xinhua.

El hombre había visitado a un paciente con MERS en un hospital surcoreano días antes de empezar a encontrarse mal, el pasado 21 de mayo, y, pese a la advertencia de su médico sobre que cancelara sus planes de viaje, voló a Hong Kong el día 26 y cruzó a Huizhou a través de la meridional ciudad cantonesa de Shenzhen.

Las 75 personas que tuvieron contacto con él, si bien inicialmente se dijo que habían sido 77, están puestas en cuarentena y ninguna presenta síntomas, según las autoridades.

El paciente está siendo tratado en el hospital municipal de Huizhou (Cantón)), mientras las autoridades chinas han pedido a otros centros que aumenten la vigilancia sobre posibles casos de MERS, ya que el riesgo de una epidemia "no puede ser descartado", según dijo ayer la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.

El Ministerio de Sanidad surcoreano confirmó ayer la muerte de otra persona que era tratada por el nuevo coronavirus, lo que eleva a cuatro el número de víctimas causadas por esta enfermedad en ese país.

El MERS, que alcanzó su punto álgido hace aproximadamente un año en varios países de Oriente Medio, tiene una mortalidad del 40 por ciento aproximadamente, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), y no puede ser combatido con vacunas o tratamientos, aunque su contagio tampoco es fácil y requiere un contacto muy directo.

Desde que fuera detectado el primer caso en Arabia Saudí en 2012, unas 1.160 personas en 24 países han sido confirmadas como portadoras del MERS-CoV.