La licitación de obra pública de las distintas administraciones en Canarias se desplomó en el primer trimestre de este año un 21% en relación al último de 2014 hasta alcanzar los 36,3 millones de euros, pero es un buen dato si se compara con los primeros tres meses del año pasado porque supone un incremento del 66,3% interanual.

Este buen comportamiento está detrás del incremento del 21,9% interanual de la venta de cemento.

Así lo recoge el informe sectorial del primer trimestre de este ejercicio elaborado por el Servicio de Estudios Económicos de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, que también incluye la evolución de la actividad en el ámbito nacional.

En el primer trimestre del año, la licitación pública en España alcanzó los 1.295,2 millones de euros, lo que supuso un retroceso del 6,4% en relación a los tres meses previos y una caída del 24,9% en la comparación interanual.

En cuanto al empleo que mantiene la construcción, los afiliados en Canarias registrados entre enero y marzo de este año ascendieron a 35.881, un 9,2% más que en el mismo periodo del año pasado, si bien el dato supone una pequeña aminoración (-0,5%) en comparación con el cierre de 2014.

La tasa del paro sectorial en las Islas se situó en el 22,5% en los primeros tres meses del año, lo que implica una bajada del 9,7%.

Mucho menos optimismo trasmiten las cifras de visados de dirección de obra de viviendas del primer trimestre, que en las Islas ascendieron a 71, lo que se traduce en una disminución del 20,6% en comparación con el mismo lapso de tiempo del año pasado.

También cae la cifra de las certificaciones de fin de obra de viviendas, que con 61 expedientes, registra una disminución interanual del 36,8%.

Ambos datos en conjunto revelan que la edificación de casas sigue siendo débil al iniciarse y concluir menos viviendas en Canarias que hace un año.

La mala situación del mercado inmobilario residencial también se evidencia en las hipotecas, cuyo importe medio en las Islas (114.257) un 11,5% inferior al de hace un año.

En cambio, el Indicador de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA) -que mide la confianza empresarial- mejoró un 6,7%.