Un objetivo marcado en la piel y un sentimiento infinito de compartir una jornada de extraordinaria convivencia. Con estas premisas, cerca de 900 personas de la comunidad educativa del colegio Pureza de María del populoso barrio de La Cuesta participaron hace unos días en la Carrera Solidaria, una iniciativa de la familia de la Madre Alberta desarrollada para recaudar fondos para sus misiones en Camerún y República Democrática del Congo.

La Carrera Solidaria se ha convertido en una de las citas ineludibles del programa de actividades de la congregación, que este año hicieron añicos cualquier previsión convirtiendo el evento en una auténtica fiesta familiar en el más amplio sentido de la palabra.

A través del deporte, los 600 alumnos de Infantil, Primaria y Secundaria del cole, un buen número de padres y madres, así como todo el profesorado y parte de la congregación se echaron unas carreritas en un circuito especialmente diseñado para la ocasión por las calles del entorno y con una distribución según las edades y cursos.

A partir de aquí, las risas y el jolgorio se adueñaron del entorno y ganaron sin contemplaciones a las lágrimas que se produjeron por alguna que otra caída, que rápidamente fueron vencidas por los padres y profesores de Infantil tras el tarareo del "sana, sana, culito de rana...", como se pudo demostrar.

Al final, tras el esfuerzo realizado, las viandas se adueñaron del lugar, así como la satisfacción de haber contribuido a través de la Carrera Solidaria con las personas que trabajan con los que menos tienen.