El pasado domingo finalizó el plazo que el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife había dado a la empresa constructora Desurcic para que llevara a cabo el nuevo acceso al campo de fútbol de San Andrés, dado que el que utilizaban hasta octubre de 2014 quedó destrozado por la riada.

Ahora, supuestamente, la Gerencia de Urbanismo iniciaría una ejecución subsidiaria para realizar dicha urbanización. No obstante, Desurcic tiene dos meses de plazo para contestar al último requerimiento de Urbanismo, por lo que las demandadas obras se pueden dilatar aún más.

Desurcic siempre ha estado dispuesta a llevar a cabo las obras de urbanización que construirían el acceso al campo de fútbol de San Andrés. Sin embargo, se encontró con la férrea oposición de los vecinos de la zona, ya que Las Huertas es el núcleo del caso Las Teresitas, en las que unos terrenos aparecieron a nombre de dos propietarios (Inversiones Las Teresitas y los privados) en el Registro.

Por ese motivo, Desurcic solicitó al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife que garantizara el acceso a los terrenos. El consistorio, a su vez, ha solicitado dos o tres veces permiso al Juzgado para entrar en los terrenos a la fuerza, pero siempre se lo han denegado. La última vez, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número dos les denegó el acceso argumentando que los propietarios de los terrenos no habían sido notificados formalmente y que el consistorio tenía que concretar los plazos y tiempos que eran necesarios para ejecutar la obra.

En enero de 2015, el Partido Popular, entonces en la oposición, presentó una moción para que se iniciara el proceso de ejecución subsidiaria del acceso al campo de fútbol de San Andrés. Solo de esa parte para garantizar la continuidad y solvencia del Club Deportivo San Andrés, ya que en ese pleno ya advertían de que su continuidad estaba en riesgo si el consistorio no arreglaba el problema del acceso al campo.

El Pleno acordó por unanimidad instar a la empresa Desurcic a que acometiera las obras a las que se había comprometido y, en caso de que no lo hiciera, Urbanismo lo haría vía ejecución subsidiaria con el dinero del aval depositado por la empresa en su momento.

Ocho meses después de la riada y casi seis meses después de esta moción, la situación sigue siendo la misma, aunque se ha avanzado en la tramitación administrativa de una supuesta ejecución subsidiaria.

Previsiblemente, la empresa Desurcic querrá explorar el posicionamiento del nuevo grupo de gobierno antes de iniciar ninguna acción.

No obstante, la empresa siempre se ha mostrado interesada en llevar a cabo las obras, desplazando hasta el lugar las máquinas para iniciar las obras, pero encontrándose con la férrea oposición de los otros propietarios, los vecinos.

Francisco Albendín, uno de los afectados, lleva desde la riada sin poder sacar dos vehículos de su casa, porque la carretera se la llevó el agua.

Tanto él como su familia solicitan al consistorio que arregle el acceso que existía antes, pero el ayuntamiento se ha negado en redondo en gastar un euro más en el camino real.