Y llegaron los días de tregua en el aeropuerto de Los Rodeos. Nueve días después de iniciarse una huelga indefinida auspiciada por los trabajadores de la limpieza de la infraestructura aeroportuaria, ayer se retomó la normalidad en espera de que la empresa adjudicataria se siente el próximo día 7 de julio con Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) para determinar las penalizaciones por incumplimiento de contrato.
Desde la primera hora de la mañana de ayer, el personal se puso manos a la obra para adecentar las instalaciones. Hasta ese momento, los residuos, la basura y el mal olor se adueñaron tanto del exterior como del interior del aeropuerto, un problema que llegaba a ser insoportable, tal y como operarios, usuarios y viajeros denunciaban continuamente desde que se inició el paro.
"Aleluya, ya la situación era insufrible", dijo un empresario que se encontraba en espera de uno de los vuelos en Llegadas. De la misma opinión es un operario que se incorporaba a su puesto de trabajo, el cual señaló que "una cosa es verlo por la tele, que puede estar muy gracioso y todo, pero muy distinto es vivirlo, sin querer meterme con la razón del conflicto laboral".
Una vez firmada la tregua, el presidente del Comité de Empresa, de CCOO, Iván Jorge, quiso dejar claro que "el conflicto no ha terminado. Para nada. Todo pasa por el día 7 de julio, justamente cuando la empresa se tiene que reunir con Aena para que las indemnizaciones y penalizaciones económicas no sean grandes y en base a eso nos pasarán una oferta para solucionar el problema de contrataciones".
"¿Pesimista? Hombre, si Aena no quiere llegar a un acuerdo, pues la cosa está complicada", aseguró el representante sindical, quien destacó el papel importante que tiene AENA bajo su punto de vista, "ya que la empresa dice que las indemnizaciones no las puede asumir con el personal que tiene. Por eso es la reunión del próximo día 7", añadió Jorge.
En este sentido, el jueves, los representantes de la empresa adjudicataria del servicio, Multianu SL, se reunieron con los trabajadores para intentar llegar a un acuerdo sobre los problemas de las bajas de los empleados, los despidos y la merma de efectivos especializados para mantener el aeropuerto en condiciones y se llegó al acuerdo de que la empresa cubriría parte de las bajas del personal, así como una parte importante de las vacaciones a las que tienen derecho disfrutar.
Esa negociación directa entre los trabajadores y la empresa, y no con AENA tal y como por error se informó en la edición de ayer, ha desembocado en una tregua que se extenderá hasta el próximo día 7, fecha en la que la empresa y AENA se sentarán.