Los españoles tienen derecho a una sanidad pública y gratuita, así está establecido en el cuerpo normativo estatal. Sin embargo, esta circunstancia hace que la mayoría de los usuarios de los servicios sanitarios desconozca el coste real que tienen y les cause sorpresa saber que el mero hecho de estar un día hospitalizado en una habitación normal cuesta 656,42 euros y que este coste se eleva hasta los 2.466 euros cuando la estancia es en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) o en a Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Operar unas cataratas, uno de las intervenciones quirúrgicas más habituales y numerosas en la sanidad pública canaria, supone al erario público 1.512 euros, cifra que se eleva hasta los 2.390 euros si también se opera el glaucoma bilateral.

Lo mismo sucede con las varices: una intervención, a priori sin mayor riesgo para el paciente, pero requiere de la movilización de recursos por valor de 1.089 euros, al igual que un juanete (hallux valgus adquirido) que cuesta 956,03 euros y operar una hemorroides que son otros 981 euros.

Obviamente, a mayor gravedad más costosas son las intervenciones, situándose a la cabeza de todas ellas los trasplantes que en el caso de ser renal, donde el Hospital Universitario de Canarias está considerado uno de los mejores centros de España, supone una inversión mínima de 31.011,94 euros.

El hepático es si cabe más caro con un coste de 34.411,22 euros y en este órganos es el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria uno de los punteros del país.

En el área de radiología y quimioterapia quizás a muchos les sorprenderá saber que una sesión de quimioterapia oncológico vale 521,02 euros al día y por persona y la hematológica 779,53.

En la rama de cardiología, la angioplastia, que es el procedimiento que consiste en introducir un balón para dilatar una arteria ocluida (total o parcialmente), con el fin de restaurar el flujo sanguíneo, obstruido por placas de colesterol y/o trombo y que generalmente ha causado un infarto o una angina supone para la sanidad pública canaria un coste de 6.737 euros a lo que habitualmente se suma posteriormente la colocación de un implante de Stent con un coste de 3.296, 18 euros.

Dentro del radiodiagnóstico existen multitud de pruebas y, por lo tanto, numerosas tarifas.

Quizás destacan las ecografías que oscilan entre los 95,21 euros una convencional a los 1.059 de una de drenaje de abscesos.

Respecto a las mamas, una simple exploración está cuantificada en 20,50 euros y una mamografía varía entre los 128 y los 380 euros, según el caso.

95,21 euros es el coste mínimo que tienen realizar una prueba de Rayos X aunque puede llegar a superar los 700 se aprovecha para realizar una biopsia por aspiración. Los scanner sí que tienen un mayor coste, puesto que el más sencillo tiene un precio de 130,88, pero la mayoría superan ampliamente los 300 euros hasta llegar a los 365,32.

Tragarse un cuerpo extraño que este quede alojado en alguna parte del aparato digestivo puede conllevar serios riesgos para el paciente por lo que este tipo de operaciones se realizan frecuentemente por la vía de urgencia. Su coste está establecido por el Servicio Canario de Salud (SCS) en 1.931,82 euros.

En el punto contrario se sitúan las pruebas de alergia (55 euros si es a medicamentos y 180,15 si se hace la prueba per cutánea), que con un coste muy pequeño ayudan a diagnosticar y tratar a cientos de personas todos los años.

Lo mismo sucede con la detección precoz de anomalías en el embarazo, puesto que la amniocentesis cuesta 54,06 euros, 150 si a ello se une un control ecográfico y 43,33 una ecografía selectiva de malformaciones fetales.

Los partos suponen una gran movilización de personal y medios sanitarios lo que se traduce en que si una mujer tuviera que pagar por dar a luz en alguno de los hospitales del SCS tendría que abonar 1.222,40 euros, más otros 774,35 si el parto se le ha tenido que inducir y otros 1.222,40 en caso de haber necesitado una cesárea.

Si para ser madre tuvo que recurrir a la fecundación in vitro, a ello también habría tenido que sumar otros 2.438,82 euros y si quiere que se extraiga y conserve el cordón umbilical debería abonar otros 1.720,92 euros.

Finalmente, el coste de residir en islas también se deja notar en la sanidad pública y supone uno de los capítulos más importantes del presupuesto, puesto que un traslado de un paciente en helicóptero tiene un precio establecido de 6.407,30 euros, cifra que se dispara hasta los 21.628,06 euros si el traslado ha de hacerse en avión y desde el Archipiélago hasta la Península.

Si el problema de salud se presenta y puede tratarse en una misma isla, disponer de una ambulancia de soporte vital básico cuesta 301,03 euros cada vez que se moviliza.