Óscar García González (Bilbao, 1969). Licenciado en Ciencias Físicas por la Universidad Autónoma de Madrid y MBA por la de La Laguna. Pero, sobre todo, alguien que se precia de "haber pateado" Santa Cruz durante cuatro años con el objetivo de conocer su realidad social tras ser elegido concejal por el Partido Popular en 2011. Desde la oposición entonces y en el nuevo equipo de gobierno, ahora, como responsable de Asuntos Sociales y del IMAS.

¿Cómo ha encontrado el IMAS?

Mejor que cuando entré con José Manuel Arocha en 2011. Había una deuda, las ayudas tardaban en llegar y no se podía atender a todas las personas y familias que tocaban a la puerta del ayuntamiento.

Resuma las grandes líneas de actuación que ha diseñado.

El objetivo fundamental del pacto y el compromiso del alcalde es mejorar la calidad de la atención social a las familias necesitadas y dotarnos de los medios humanos y materiales necesarios. Contamos con un gran equipo formado por casi un centenar de trabajadores. De forma complementaria reactivar la economía para crear oportunidades de empleo. Intervenir con familias y personas porque este es el mandato de las personas. Que ellas mismas superen barreras a través de la inserción sociolaboral. También desarrollar el Plan Estratégico, ya redactado, y los sectoriales de discapacidad, droga, mayores, sin hogar, o infancia y familia.

¿La máxima ejecución del presupuesto es un objetivo?

Será posible con gestión y con la aplicación tecnológica que vamos a desarrollar por completo ahora como en el caso de la ficha electrónica que nos permitirá destinar recursos a sacar adelante proyectos para ejecutar el presupuesto. Ese es el reto.

¿Y agilizar el plazo para dar las ayudas sociales?

Estamos en ese camino con la modernización tecnológica, a través de herramientas informáticas como el tramitador de expedientes o la cita previa que ha eliminado las colas en las UTS. Los tiempos se han reducido y hay que reducirlos aún más. Es necesario ampliar una plantilla de nueve trabajadores sociales. Otra pata clave es el tercer sector, organizaciones como Cáritas, Cruz Roja o el Banco de Alimentos. Con su apoyo y el de los profesionales, la propia persona debe protagonizar el cambio. Por eso me gusta más hablar de Bienestar Social.

¿Cambia la perspectiva al pasar de la oposición al gobierno?

Durante cuatro años en la oposición, el despacho municipal del PP ha sido como la octava UTS. Por allí han pasado cientos de familias con necesidades de pagos de alquiler, PEAS, para luz y agua o con la amenaza del desahucio. Antes tenían dedicación exclusiva y ahora también. A disposición al cien por cien de las personas, con nombres y apellidos, y creo que en su mayoría, con conocimiento directo de su situación.

¿Para cuándo el traslado del IMAS a Ofra?

Primero se traslada a primeros de julio, o sea ya, la UTS de Ofra a un edificio, el antiguo colegio Ofra San Pío adaptado y accesible. El proyecto está avanzado y ya he visitado la obra. En un año espero la oficina central del IMAS ya esté allí para ahorrar 150.000 euros anuales que equivalen a 800 ayudas de alquiler.

¿Más recursos humanos y materiales para las siete UTS?

Sí. Ya se ha avanzado con el traslado a Los Majuelos para atender con mayor calidad a la población del Suroeste, y la de Añaza se va a ampliar. Vamos en camino a los Centros Integrados de Atención y Servicios Sociales (CIASS) con equipos multidisciplinares. Confío en el compromiso del Gobierno de Canarias porque hay 600 expedientes de PCI y no nos llegará el presupuesto a después del verano. Hay que trabajar con las familias y las personas en su distrito y en su barrio. Menos tarea administrativa y más de campo. O mantener y mejorar el servicio a domicilio a mil mayores.

¿Qué prevé respecto a las Escuelas Infantiles?

Más plazas, sin ser competencia específica municipal. En La Laguna hay siete centros infantiles, y es un ejemplo. De acuerdo en como mínimo dos más: en la parte alta del Suroeste y en Anaga.

¿Y sobre el Pancho Camurria?

Un tema a resolver con atención y a estudiar muy bien los pasos y las acciones a acometer.

¿Comienza una nueva etapa del Centro Municipal de Acogida?

Confío mucho en el nuevo contrato, a partir de julio, con Grupo 5 y por cuatro años. Nuevos servicios, una segunda UMA o un piso tutelado para la inserción serán algunas novedades. Creo que he demostrado mi compromiso personal con el sinhogarismo. Y no renunciamos a la vieja batalla de la cofinanciación del Cabildo.

¿Cuál es su idea sobre las políticas de Atención Social? ¿La del PP es la caridad?

He luchado y lucho contra esa imagen estereotipada. Lo resumo en intervención, normalización y autonomía. Me gusta más hablar de apoyo que de ayuda. No vamos a escatimar esfuerzos. Esa es mi responsabilidad. Y que la economía genere empleo. Con transversalidad y no recurro al tópico porque si se rehabilitan las 1.000 viviendas pendientes en la ciudad se crearán 800 puestos de trabajo. Y me ofrezco a escuchar a la oposición. A los que ya estaban y a los que están, incluida, por supuesto, Alicia Álvarez, mi antecesora.