Responsables de la empresa Desurcic venidos de Madrid y el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife se reunieron ayer para desbloquear la construcción de los accesos al campo de fútbol de San Andrés. Sin embargo, no se alcanzó ningún acuerdo para iniciar las obras en el transcurso de la reunión, según informaron fuentes consistoriales.

La paralización se remonta a nueve años atrás y está entroncada con el caso Las Teresitas.

La situación en la zona se hizo especialmente grave tras la riada del 19 de octubre de 2014. El camino real por el que se accedía de forma temporal al campo de fútbol quedó totalmente destruido y el ayuntamiento se negó a reconstruirlo por el alto coste del mismo.

En su lugar, el concejal de Obras e Infraestructuras entonces, Dámaso Arteaga, reiteró que Desurcic tenía que hacer la urbanización por donde le correspondía.

Sin embargo, el problema que subyace es que los terrenos que adquirió Desurcic a Inversiones Las Teresitas (ILT) están inscritos a nombre de dos propietarios distintos en el Registro de la Propiedad.

Así, parte de esa urbanización pasaría por la huerta de Francisco Albendín, que en más de una ocasión se ha puesto delante de las máquinas para evitar los trabajos. Por eso, el alcalde firmó un decreto para garantizar la entrada por la fuerza en los terrenos de Albendín si este se negaba.

No obstante, la petición de entrada forzosa fue rechazada por los tribunales por dos cuestiones fundamentales: no haber sido notificada formalmente a Albendín y no haber especificado la duración de las obras. Además, el decreto está en proceso de recurso contencioso-administrativo. En el pleno de enero de 2015 se aprobó instar a Desurcic a realizar las obras o, en caso contrario, iniciar una ejecución subsidiaria y pasarle después la factura.

El alcalde no quiso hacer declaraciones, mientras el concejal de Urbanismo, Carlos Garcinuño, se limitó a decir que "hemos tenido una reunión para acercar posturas y seguir trabajando".