El Diálogo del Castillo y la Nave tendrá en la presente edición de la Bajada de la Virgen una ausencia de enorme significación. Por primera vez en el último cuarto de siglo, José Feliciano, el "capitán" de la Nave de María, no podrá asistir al acto debido a su avanzada edad y su delicado estado de salud.

Todos los componentes del número, y en especial los marinos que componen la tripulación del Barco de la Virgen, tendrán un recuerdo especial para quien ha sido su patrón y ha dirigido las maniobras del navío desde el año 1990.

El hasta ahora patrón de la Nave fue además quien defendió que el acto debía pasar a manos de personas civiles vinculadas al mundo de la vela de la Isla, y no estar asumidas por la Armada.