Red Eléctrica de España (REE) tiene prevista una interconexión entre los sistemas eléctricos de Tenerife y La Gomera con el objetivo reducir costes de generación, las emisiones contaminantes y las limitaciones de penetración de energías renovables. Además, este enlace aumentará la seguridad y fiabilidad del suministro, asegura la compañía. La iniciativa está en fase de estudio y se estima que podrá estar en servicio en 2019.

En todos sus proyectos, REE mantiene un compromiso "muy exigente con la sostenibilidad, la conservación del patrimonio natural, la fauna y flora de sus hábitats (terrestres y marinos) naturales y el fomento del patrimonio cultural y de la sociedad". Desde la fase de diseño de sus proyectos, REE "planifica un conjunto de medidas preventivas y correctoras con el objetivo de minimizar los efectos de las nuevas infraestructuras en el entorno".

Los sistemas eléctricos canarios se caracterizan por ser sistemas aislados y de tamaño reducido si se comparan con el sistema eléctrico peninsular, que esta interconectado con el sistema europeo. Los sistemas eléctricos insulares son "más vulnerables y tienen unos costes de generación superiores", dice REE.

Además, tienen mayores limitaciones, impuestas por criterios de estabilidad, para la integración a la red de energías renovables. Esto, unido al hecho de que deben usar grupos de generación de potencia nominal inferior y comúnmente menos eficientes, "hace que las emisiones contaminantes en este tipo de sistemas eléctricos sean también superiores si los comparamos con los grandes sistemas eléctricos".

La interconexión Tenerife-La Gomera se ha planteado en un contexto en el que se está persiguiendo la reducción tanto de la vulnerabilidad, como de los costes de generación y de las emisiones contaminantes de los sistemas eléctricos aislados. En este sentido, es importante resaltar que la demanda eléctrica de La Gomera es del orden de 50 veces inferior a la demanda en Tenerife. Esto significa que pequeñas variaciones en la demanda o pequeñas contingencias en la red de distribución o en el sistema de generación provocan efectos muy notables en La Gomera.

El enlace posibilitará aumentar el tamaño de los sistemas mejorando la eficiencia y fiabilidad en el suministro para el conjunto del sistema formado por ambas islas. Ambos sistemas eléctricos funcionarán como si fuera uno solo, incrementando la posible penetración de producción eléctrica a partir de fuentes de energía renovable, muy especialmente en La Gomera, aprovechando las favorables condiciones de los recursos existentes. Esto redundará en una reducción de los costes de generación eléctrica y de la dependencia exterior de combustibles fósiles, así como en una mejora medioambiental de las islas interconectadas, asegura REE.

42 km de longitud

El enlace tendrá una longitud aproximada de 42 kilómetros. Se estima que la profundidad máxima que podría alcanzar el enlace se situaría en los 1.000 metros, por lo que se espera sea el cable de su tipo más profundo del mundo. Estará compuesto por un doble circuito en corriente alterna con una tensión de servicio a 66 Kv.

Gran inversión

REE ha iniciado los trabajos de investigación ambiental y geofísica en el espacio marítimo entre Tenerife y La Gomera. El objetivo es estudiar una franja costera de 50 kilómetros cuadrados (el equivalente a 5.000 campos de fútbol) y de las correspondientes áreas terrestres hasta las subestaciones de conexión, para detectar las zonas de mayor riqueza y sensibilidad ambiental y así diseñar un trazado con los menores efectos ambientales en el entorno terrestre y marino. Para la implantación de la interconexión son necesarias dos nuevas subestaciones a 66 Kv: la de El Palmar, en La Gomera, y la de Chío, en Tenerife. La inversión aproximada de la interconexión y sus actuaciones asociadas es de 88 millones.