Agentes de la Policía Nacional han detenido a seis personas, una de ellas con antecedentes policiales, por estafar más de 1,3 millones de euros a 24 empresas españolas.

Las detenciones se realizaron en las localidades de Telde, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife, según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía en una nota de prensa.

La investigación se inició a raíz de la denuncia de una empresa dedicada al sector de la joyería contra una sociedad a la que entregó una importante cantidad de joyas que no le habían sido abonadas.

Los detenidos formaban parte de un entramado dedicado a la estafa mediante el llamado ''timo del nazareno''. El principal encartado, que respondía al nombre ficticio de ''Miguel Müller'', aparentaba ser el representante de una empresa filial o asociada a un prestigioso grupo multinacional alemán.

Así se creó una apariencia de solvencia y seriedad económica por la que se obtuvo la confianza de al menos 24 empresas proveedoras en todo el territorio nacional.

Una vez entablada la relación comercial, se realizaban pedidos, principalmente de terminales telefónicos, material informático y joyería, que nunca se llegaban a abonar, alegando problemas con la empresa matriz en Alemania para afrontar los pagos. Inmediatamente después, procedían a revender la mercancía impagada a otras empresas, quienes la adquirían sin conocer su ilícita procedencia.

En muchas ocasiones los impagos eran asumidos por las compañías de seguros, lo que frenaba cualquier acción legal contra los estafadores, que en algunos casos era derivada a la vía civil, lo que les facilitó operar por más de dos años.

Una de las empresas perjudicadas con sede en la localidad de Vecindario (Gran Canaria) sufrió un perjuicio patrimonial de 415.000 euros, estimándose que el fraude global se eleva a más de 1,3 millones de euros.

Tras cuatro meses de investigación, los agentes procedieron a la detención del principal artífice de la trama, de 45 años, así como de cinco personas más que figuraban como administradores o empleados de las sociedades utilizadas.

Asimismo, se realizaron registros en los domicilios de los detenidos, así como en las sedes de las empresas del entramado, interviniéndose abundante documentación y material informático.

Instruido el correspondiente atestado policial, los detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente, quien decretó el ingreso en prisión del principal encartado y la libertad con cargos del resto.

La intervención policial fue llevada a cabo por agentes adscritos al Grupo de Delitos Patrimoniales la Brigada Provincial de Policía de Judicial de Las Palmas.