Hablar de política, y de la canaria, que es la que nos interesa. Ya tenemos Gobierno de la Comunidad y el nuevo presidente es Fernando Clavijo Batlle, que no estoy seguro si tiene que ver con Ulpiano Batlle del Arco y su esposa, Purita, desaparecidos hace años y de quienes tengo recuerdos entrañables porque fuimos compañeros y defensores de los derechos de las personas con discapacidad psíquica en Aspronte. Deduzco que eran sus abuelos maternos, por lo que envío a su madre un saludo cariñoso.
No tengo la suerte de conocerlo personalmente, pero su trayectoria me indica que estamos ante un joven dinámico y preparado que empezó de joven en ATI y que ha adquirido un buen bagaje, pues desarrolló muy buena labor en la administración local y como alcalde de La Laguna. Parece prudente y de antecedentes familiares le vienen la seriedad, la solvencia y la honestidad, aspectos fundamentales para ser un buen presidente.
Nuestra comunidad no es fácil de gobernar, siete islas, cada una con sus propias necesidades e idiosincrasia, y él debe estar para todas, defendiéndolas y haciendo región. Sus primeras decisiones y promesas son consecuentes, pues el acercamiento a Soria es un gran paso, ya que las administraciones están para servir al ciudadano y no para enfrentamientos por el color político. Pero permítame unas modestas sugerencias de un empresario que ha vivido muchas vicisitudes a lo largo de la vida.
Ha prometido ocuparse de los sectores prioritarios: empleo, sanidad, educación y asistencia social, todos un gran reto. Para ello precisa de un buen equipo de colaboradores y de quienes no les importe si la nómina anual sube, pues es fundamental tener estas áreas perfectamente cubiertas, ya que seguimos en tiempo de ahorrar y existen muchas partidas. Ha confiado en Soledad Monzón como consejera de Educación; a la diputada de Fuerteventura le ha tocado la "perita en dulce ", un área intrincada y complicada de gestionar.
Hablando de turismo, entre sus decisiones está rechazar frontalmente la ecotasa, que me parece correcto, pero afirmar, aunque existan informes que así lo digan, que las islas están sobrecargadas, no estoy muy de acuerdo. En cuanto al turismo de cinco estrellas, bienvenido, pero que no olvide que muchos de los ricachos también vienen con todo pagado, y buscan relajarse sin salir de sus hoteles, por lo que no se dejan un euro en el comercio, y la mayoría de establecimientos son propiedad de empresas o touroperadores cuyos beneficios se van fuera. Creo que dejan más dinero los turistas de los hospedajes de tres y cuatro estrellas, así que la rehabilitación de esta planta hotelera permitiría que la construcción también recupere pujanza. Por otra parte, desde Barranco Hondo hasta el sur, las medianías están abandonadas a su suerte, y el aspecto árido que presenta delata la necesidad de buscar ahí oportunidades para crear empleo.
En sanidad se va a encontrar con muchos problemas: profesionales que hacen horas extras por su cuenta por falta de personal, recursos escasos, listas de espera interminables... Tenemos una buena sanidad pero muy mejorable. El otro día en oncología observé la cantidad de gente que está recibiendo tratamiento, métodos caros y con mucha medicación. Y me sorprendió la cantidad de extranjeros de todos los continentes. No quiero parecer xenófobo, pero ¿las aseguradoras de estos pacientes en sus países de origen devuelven el dinero de los tratamientos a la Seguridad Social? Una cosas es ayudar y colaborar y otro el quijotismo paranoico.
En empleo hay que ahondar en la economía sumergida; aflorarla cuesta, pero podrían ofrecer soluciones como amnistías o rebajas fiscales y del seguro de autónomos, el más alto de toda Europa. La industria está bajo mínimos, las grandes obras no mejoran, por lo que la solución está en proyectos menores que deben ser gestionados por pequeñas y medianas empresas. Es indispensable apoyar a quien lo está pasando mal y encarrilar las ayudas, y en organizaciones como Cáritas, los gobiernos no deben intervenir, solo supervisar y controlar.
En la cultura y el ocio existen grandes posibilidades y no deben tener miedo de apostar por ello. Para la nueva legislatura, de los distintos organismos han nombrado a tres hombres capacitados: Cristóbal de la Rosa, José Luis Rivero y José Carlos Acha, tres puntales a los que deseo lo mejor.
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