Diez comunidades, entre ellas Canarias, rechazaron ayer el mismo objetivo de déficit, fijado por el Gobierno en el 0,3 por ciento en 2016 para todas las autonomías, y que ha contado con el apoyo de las cinco comunidades gobernadas por el PP, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Todas las comunidades socialistas, además de Cataluña, Canarias -representada en este caso por su consejera de Hacienda, Rosa Dávila- y Cantabria, mostraron su rechazo al objetivo del déficit del 0,3 por ciento simétrico para todas las autonomías en 2016, al apostar por una mayor flexibilidad para los próximos años.

Frente a las criticas socialistas, las comunidades del PP consideraron que con este objetivo de déficit simétrico se consolida la senda del crecimiento y la recuperación económica.

Desde el PSOE, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, explicó su voto en contra porque desconoce la metodología y los criterios en los que se ha basado el reparto, por lo que calificó la actitud del ministro de "oscurantista".

El consejero de Hacienda y Modelo Económico de la Comunidad Valenciana, Vicent Soler, justificó su rechazo al objetivo de déficit por ser "incumplible e irrealista" y subrayó que el problema de la financiación es "de ingresos y no de gastos".

En esta línea, la consejera de Hacienda y Administración Pública de Extremadura, Pilar Blanco-Morales, calificó de "injusto e inequitativo" el objetivo de ajuste de déficit del 0,3 % fijado por el Gobierno.

Desde Cataluña, el consejero de Economía de la Generalitat, Andreu Mas-Colell, criticó al Gobierno por imponer siempre su mayoría en el CPFF y señaló que en esta reunión nunca se acuerda nada porque lo que realmente se hace es "oficializar" o "comunicar", al tiempo que señaló que todo el mundo sabe que no se va a cumplir el objetivo de déficit del 0,3%.