La Isla cuenta en verano con una única forense "que se encuentra desbordada de trabajo", según confirmaron a EL DÍA fuentes judiciales, al no cubrirse las vacaciones que se producen, una situación que se prolonga en el tiempo y que deja el servicio bajo mínimos y a la espera de que no se produzca una baja por enfermedad.

En La Palma hay "habitualmente" dos forenses, una por cada partido judicial. Al contrario de lo que ocurre en otros muchos territorios, donde cada médico tiene asignado un determinado servicios, en la Isla deben multiplicase para encargarse tanto del levantamiento de los cadáveres como de las autopsias e informes posteriores. Pero es que además de los casos a los que prestan una atención urgente, estas profesionales se encuentran diariamente en los juzgados, una en Los Llanos de Aridane y otra en Santa Cruz de La Palma, para realizar consultas de lesiones, peritaciones judiciales, internamientos en Salud Mental...

Cuando llegan las vacaciones, tal y como ocurre en estos momentos, una sola médico forense se encarga de cubrir toda la Isla, "lo que humanamente es imposible", sentencian las mismas fuentes, que sostienen que "La Palma necesitaría un mínimo de 3 ó 4 forenses para que el servicio fuera cubierto con garantías y sin "explotar" al personal. Al menos, dos por comarca". Pero la realidad es que "ahora mismo está trabajando solo una, que se encarga de todo y que por mucho que trabaje, que la verdad es que lo hace, no puede dar avío", lo que se volverá a producir en agosto, ya que "cuando la compañera entre de su descanso, se verá en la misma situación porque será la forense que ahora trabaja la que disfrute de su mes de vacaciones, sin que nadie la cubra".

Temen que al final "la forense titular (la otra no es "fija") decida pedir plaza en otro lado y nos quedemos sin una gran profesional. En ese momento, la ciudadanía se dará cuenta de lo que hemos perdido".

¿Y si la forense se enferma? "El juez debe habilitar a un médico para una actuación determinada y esperar a que un forense venga de Tenerife para la autopsia", dicen desde el juzgado, que destacan que "cuando se produce actos tan dramáticos como un asesinato o un suicidio, como ha ocurrido en las últimas fechas, se vive una situación angustiosa y los familiares, también la sociedad, esperan celeridad en el levantamiento de los cadáveres y las posteriores autopsias. Sería bueno que supiera en qué situación trabajan las profesionales", que en la Isla no cuentan "ni con auxiliares" para su labor diaria.