Una buena noticia por fin para el maltrecho patrimonio de la ciudad de Santa Cruz. Está a punto de culminar la restauración y puesta en uso de la denominada Casa Simón, ubicada en la esquina de la calle Candelaria con la plaza dedicada a la Patrona de Canarias. Gracias a la iniciativa privada, ya que el inmueble, que pertenecía a una entidad financiera, fue adquirido en noviembre de 2011 por una cadena de joyerías de lujo que abrirá allí una tienda en breve.

En el grupo de debate de la Gestora en Defensa del Patrimonio en Facebook se ha destacado por parte de arquitectos y otros profesionales la restauración del edificio, catalogado como BIC desde 2007, con un grado de protección parcial, y fachadas orientadas a ambas vías.

La Casa Simón data de 1931 y es obra del arquitecto Antonio Pintor y Ocete que la construyó por encargo de Bernardino Simón. De estilo historicista, tiene cuatro pisos de altura y una simple mirada basta para comprobar la influencia árabe que resulta patente en los arcos de la última planta o en las columnas neonazaríes.

La Casa Simón estaba en estado de ruina y había peligro de derrumbe. La iniciativa privada garantiza su conservación. Un buen ejemplo.