Luisa abre con la humildad por bandera y cierto reparo la puerta de su casa, una vivienda de algo más de 30 metros cuadrados, aunque nadie lo diría por cómo ha aprovechado el espacio. Ella fue una de las primeras en mudarse al barrio, un ya lejano año 1956, y lo cuenta así: "El día 18 me dieron las llaves y el 20 entré en mi casa. A eso, ama de casa, me he dedicado toda la vida". Desde Taco, con tres hijos pequeños y embarazada del cuarto, junto a Francisco su marido, marino mercante, fallecido hace ya unos años. Ganaron el piso tras un sorteo en régimen social y lo pagaron poco a poco. Habla con orgullo de sus hijos, de sus nueve nietos y de los dos biznietos a los que la pareja sacó adelante con esfuerzo. Luisa es puro espíritu de La Candelaria.

Ese sello lo mantiene José López. Llegó mucho después que Luisa a la barriada -la reacción cambia según el tono con el que se pronuncie la palabra- y lleva en la sangre. Por eso se comprometió, a través de la Comisión vecinal creada al efecto, con el proceso de reposición iniciado en 2008 tras la iniciativa de intervenir en un Área de Renovación Urbana (ARU).

"Cuesta dar el paso, resume, pero alguien tenía que hacerlo. Con mis compañeros, uno por bloque: Santiago, los dos José Luis, Ramón, Verónica, Antonia, Andrés, José Manuel , Inés u Óscar". Entiende que "la lucha por una vivienda digna es tan nuestra como larga".

La ministra de Fomento, Ana Pastor, visitó hace unos días los primeros trabajos de la obra de reposición que comenzaron el pasado abril en el aparcamiento del solar de la Viuda Yanes. Allí se reubicará La Candelaria. Una visita fugaz "que valoramos" igual que la participación municipal representada en el mandato anterior por la concejala de Viviendas, Ángela Mena.

El convenio entre administraciones firmado el 2 de febrero de este año en Las Palmas para cofinanciar la reposición supuso "el paso decisivo, aunque no terminamos de entender los 14.000 euros de cuota por vecino". Dentro de un presupuesto global estimado en unos 12,5 millones.

Hay viejos agravios difíciles de resolver. Por eso en La Candelaria tienen clara la posición "vigilante y fiscalizadora para que se cumplan plazos y acuerdos. Como en Cuesta Piedra". López recuerda: "Al inicio marcamos tres grandes fases: empezar la obra, terminarla y empezar a vivir en las nuevos pisos". Para ello han superado multitud de reuniones, la amenaza de recortes estatales o el retraso en la rúbrica de los acuerdos.

No se trata solo de la vivienda y de todo lo que supone pasar de 30 metros cuadrados a un mínimo de 70, o a tener ascensor, garajes y aparcamientos. Lo explica José: "Hay que dotar de equipamientos, espacios verdes y servicios, O sea, urbanizar. Pensamos que hay espacio público de sobra".

Un barrio marcado por el paro -"yo mismo lo sufro", dice José- en el que como en otros de proliferan las "casas nido" con tres generaciones unidas por la "olla común". Eso , después del retorno por fracasos laborales o sentimentales a causa de la crisis. También se da un "pico" del "fenómeno okupa", problemática muy a tener en cuenta durante el traslado. Todo apunta a finales de 2017.

Una radiografía fugaz del barrio de Nuestra Señora de La Candelaria: 115 viviendas, 115 esperanzas de mejorar la calidad de vida. O mejor dicho: casi un millar.

Nombre y situación

Estas 115 viviendas sociales tiene su origen en el seno del Patronato de La Candelaria y de ahí su denominación. Limita con los barrios de Los Verodes, Azorín y La Cepsa.

Población

Las cifras oscilan mucho, pero los vecinos hablan de una cantidad cercana a las 1.000 personas.

Reseña histórica

Surgió en los años 50 del siglo pasado como VPO y con tipología en bloques. La inmensa mayoría ya están en régimen de propiedad. El paso del tiempo y la humedad han deteriorado las fachadas de unos edificios de donde llegaron a caer cascotes con relativa frecuencia. Se ha dado una "manita" previa a la reposición, vieja aspiración vecinal, cuyo proceso ya ha comenzado.

Servicios

Las cartillas sanitarias corresponden al centro de salud de Los Gladiolos y a las instalaciones educativas públicos de este barrio -Los Dragos y Los Verodes- acuden los niños de La Candelaria.

Movimiento vecinal

Ha habido intentos de unificar a los vecinos en diversos colectivos que no terminaron de cuajar. Ha sido el proceso de reposición el que ha movido a crear una plataforma o comisión compuesta por representantes de cada uno de los doce bloques que encabeza José López. Aquí se hace necesario un recordatorio para Luis Celso García, dirigente vecinal de Añaza y vecino que, como dicen los residentes, "ayudó mucho con el papeleo y fue clave al principal preocuparse por impulsar una lucha fundamental para nuestra gente".

Pepe Benavente

Antes del éxito, del "Polvorete" o del "Medio peso", el cantante Pepe Benavente vivió sus primeros 20 años en la casa familiar de La Candelaria, uno de los pisos de la Delegación Nacional de Sindicatos. Con sus padres y sus seis hermanos. Entre fincas, huertas y plataneras pasó su infancia de juegos y tradiciones con los amigos en un espacio geográfico muy diferente al actual. Ya no existe el campo de fútbol donde dio las primeras patadas al balón ni el antiguo cine Cacharrito de sus aventuras juveniles. Llego el éxito, pero Pepe siempre se ha sentido de La Candelaria. Estará contento con una rehabilitación que ha defendido como algo propio.