El césped del Heliodoro Rodríguez López da miedo. Su imagen, a escasos cinco días del estreno liguero del Tenerife en casa, dista mucho de la recomendable para acoger un partido de fútbol profesional. El concierto del grupo mexicano Maná, que abría su gira "Cama incendiada", lo ha dejado en muy mal estado. La superficie que debía proteger el terreno de juego no ha cumplido su función tal y como se esperaba, por lo que la preocupación es patente en el club y en la empresa encargada de tenerlo en buen estado.
Hardisson Jardinería ha multiplicado esfuerzos desde el pasado viernes, incrementando el número de efectivos que trabajan para recuperar el césped y realizando todo tipo de operaciones para ello. Para empezar, ha sido necesario reponer en varios tepes el verde en algunas zonas. Además, se ha pinchado y resembrado en otras. Pese al esfuerzo, no hay garantías de que ante el Nástic de Tarragona se encuentre en las condiciones idóneas para la práctica del fútbol. Será otro enemigo más para los blanquiazules.
"No estará como si no hubiera habido un concierto", explicaba ayer Eduardo Hardisson a El Día. En este sentido, el responsable de la empresa que lleva más de 20 años cuidando el verde del recinto espera "reactivar la planta" con un tratamiento intensivo a base de "descompactar, resembrar y poner tepes, abonos y estimulantes". No obstante, el resultado final es una incógnita. "Quedará lo mejor que podamos", dijo.
Los gastos correrán a cargo de de la productora del evento, Planet Events, que como sucede en estos casos habrá suscrito un seguro que cubra los daños. Pero mientras se subsanan los sufrirá el Tenerife, que tiene previsto ejercitarse en el coliseo capitalino este sábado. Ayer mismo se preocupaba Raúl Agné por el estado del terreno de juego, recibiendo unas noticias no demasiado halagüeñas sobre la evolución del mismo.
El Heliodoro ya había acogido otros conciertos, como el de Mecano, Shakira o Maná en una gira anterior. Pero siempre había sido a principios de verano. Incluso, en alguna ocasión se celebró justo antes de reponer por completo la superficie. Solo las finales de murgas de 2010 y 2011 fueron en mitad de la temporada y se saldaron sin grandes daños.
Sorprende que este primer concierto de Maná sea el único de la gira que se celebre en un estadio de primer nivel. El exitoso grupo mexicano tiene previstos otros siete recitales en la Península: La Coruña (Coliseum), Benidorm (Estadio Guillermo Amor), Málaga (Estadio de Atletismo Ciudad de Málaga), Madrid (Barclaycard Center), Barcelona (Palau Sant Jordi) y Bilbao (Bizkaia Arena BEC). Las ciudades con equipos en Primera o Segunda no cedieron sus estadios principales por encontrarse ya en período de competición. ¿Por qué se autorizó en Santa Cruz de Tenerife el fin de semana que comenzaba la Liga?
Se dio la espalda a los informes negativos
Tanto el Tenerife como Hardisson Jardinería emitieron informes negativos para evitar la celebración del concierto de Maná en el Heliodoro, pero el Cabildo autorizó el evento. Los plazos eran demasiado cortos para recuperar el césped. De hecho, el escenario y otros elementos no se terminaron de retirar hasta el pasado lunes. La decisión se tomó sin tener demasiado en consideración la normativa de uso del recinto, en la que se fijan reglas muy claras para la cesión del mismo a este tipo de actividades. Para empezar, se aclara que deben ser eventos que no perjudiquen "el uso principal". También se hace alusión a quién debe otorgar el permiso: "La Comisión de Gobierno o el presidente de la Corporación (Carlos Alonso)". Incluso, se refiere la normativa a la conveniencia de procurar que estos eventos sean "al término de la temporada oficial y con antelación suficiente al inicio de la siguiente".