"Un equipo coordinado de varios servicios actuará desde mañana (por hoy) siguiendo el protocolo habitual y como ya se ha hecho en otras ocasiones en el caso de A.M.G.". Así explicaron ayer fuentes municipales la acción que se acometerá con una indigente, de carácter agresivo, que, tal y como han denunciado varios vecinos, suele deambular por las calles del centro de Santa Cruz y pernoctar en los bancos. Pero su historia no es ni mucho menos nueva.

Sin hogar, de entre 55 y 60 años. y de origen italiano. Ese es el perfil de quien llegó por primera vez a la capital tinerfeña en 2007 procedente de la zona de Adeje y Arona en el sur de la isla. El 6 de enero de 2012 se le realizó una intervención médica para valorar su estado de salud y luego comenzó el denominado Procedimiento de Traslados no Voluntarios para personas que padecen determinadas patologías de salud mental que les impiden cuidarse a sí mismas o pueden dañar a terceros. En el mencionado Protocolo intervino el Equipo de Atención Psiquiátrica Extrahospitalaria del Hospital de la Candelaria, así como los servicios sanitarios y de seguridad del 112.

Esta persona "fue internada en el hospital y estuvo en tratamiento varias semanas. Una vez recuperada y tras algunas gestiones se la concedió una plaza en un Centro Abierto de Mayores del IASS en Ofra. Sin embargo, la señora lo abandonó voluntariamente y volvió a trasladarse al sur"".

Durante los dos últimos años, según las fuentes consultadas, "ha estado viviendo en la calle en el municipio de Arona".

Su retorno a Santa Cruz se ha producido este mismo verano cuando fue localizada por la Unidad Móvil de Acercamiento (UMA) "que le ha hecho un seguimiento desde ese momento".

Esta semana, explican desde el Consistorio, "se han dado los pasos para poder realizar una intervención de calle con el objetivo de volver a trasladarla al hospital de la Candelaria y ponerla en tratamiento, siempre que así lo dictaminen los profesionales. La intervención está prevista para el viernes 28 (hoy)".

"Todas las personas sin hogar que transitan por el municipio, concluyen, tienen un seguimiento de la UMA único e individualizado. A todas se las ofrecen los recursos sociales de la red para Personas Sin Hogar (PSH), pero si no quieren acudir ni aceptar ningún tipo de ayuda los servicios sociales no tienen autoridad, ni competencia, ni es su misión obligar a nadie. Nunca, en ninguna circunstancia, se deja abandonado a nadie".