Alicia Cebrián regresó del Test Río 2016, cita preolímpica que se llevó a cabo en el mismo campo de regatas que albergará dentro de un año los Juegos de Brasil. La regatista del Real Club Náutico de Tenerife (RCNT) representó a España y sacó conclusiones sobre cómo navegar de la bahía de Guanabara.

"Mi fui de Río con muchas cosas aprendidas", explica la olímpica en Londres 2012: "Hay que esperar cualquier tipo de condición y hay que estar preparada y entrenada para ello. Siempre escuché que en Río predominaba el viento flojo y suave, pero vi que no es así. Los días previos a la competición tuvimos viento fuerte y olas enormes".

Sobre el Test Río 2016, indica que "la semana de competición fue muy buena. Navegamos en distintos campos de regatas cada día. Cada campo de regatas tiene su particularidad, ya que en ninguno las condiciones de viento y corriente son iguales".

"Hay seis campos de regatas, tres dentro de la bahía de Guanabara y tres fuera, frente a la playa de Copacabana. Cada día había que sacar conclusiones puesto que en los Juegos el formato de competición va a ser igual, pues cada día navegaremos en un área diferente", añade al respecto.

"La corriente es un factor clave, sobre todo dentro de la bahía. Y es que allí desembocan varios ríos y las subidas y bajadas de marea son de coeficientes bastante altos. Por otro lado, la bocana de la bahía es bastante estrecha, por lo que la entrada y la salida de agua es como si pasase por un embudo", comenta.

"En muchas zonas de los diferentes campos de regatas se veían perfectamente remolinos creados por las fuertes corrientes. Entrar en uno de ellos podía hacerte ir rapidísimo o por otro lado incluso hacerte caminar hacia atrás", advierte la tinerfeña.

En Río terminó para ella la primera mitad de la temporada 2015. Ahora empieza la segunda. Ella misma explica que "a mediados de septiembre me voy al campeonato italiano, que se celebrará en Nápoles. Ahí tengo un entrenamiento cerrado, además de ir probando diferentes opciones de material. Luego continuaré con la semana olímpica francesa en La Rochelle, para no abandonar las sensaciones de tensión y nervios que te puede llegar a producir la competición. Todo ello para preparar de la mejor manera el Mundial".