Estar en un partido político sólo tiene sentido si lo que quieres es cambiar las cosas de la gente con la que convives, si deseas mejorar el mundo en el que van a vivir tus hijos. Por eso trabajamos, por estar al frente de las instituciones desde las que se puede transformar la realidad.

Mucha gente opina que estamos en tiempos en los que el político tiene que "vender" su mensaje, con o sin contenido. ¿Vender? Sí. Así hablan algunos de lo que se debe hacer en política: "Vender". El otro día me decían que la gente quiere líderes que engatusen. Quieren espectáculo. Pues me van a permitir que discrepe de los expertos. Yo creo que la gente -al menos la que yo conozco todos los días- empieza a estar harta de tanto "espectáculo".

Hay que levantarse muy temprano y trabajar hasta muy tarde, tener la cabeza siempre ocupada en lo público. Hay que escuchar a todo el mundo, ser firme en tus convicciones, pero también dispuesto a cambiar de posición si consideramos que el otro tiene razón, independientemente de sus afinidades políticas. Y hay que conseguir, si es posible, que todo el mundo trabaje en una misma dirección, con un mismo fin, que no es otro que el de mejorar las condiciones de vida de las personas que nos han elegido para estar aquí. El plan de Tenerife pasa necesariamente por esta creencia en la que todos podemos aportar.

Cuando antes de las elecciones lanzamos la idea del Pacto por Tenerife pusimos negro sobre blanco acerca de lo que esta Isla necesitaba tanto en inversiones y obras concretas que aún se nos adeudan como en otras medidas para favorecer el empleo y mejorar la sanidad, temas estos últimos que constituyen la prioridad del Pacto por Tenerife. Eran las cartas de una baraja con la que todos teníamos que jugar. Da igual estar en el gobierno o la oposición. Todos queremos lo mejor para Tenerife, así que por qué no trabajar conjuntamente por ello. Hemos pedido la colaboración de todos los partidos para impulsar las obras estratégicas que van a marcar la diferencia en el futuro de nuestra tierra en temas como la sanidad, las prestaciones sociales, las políticas de empleo, la educación o la mejora de la competitividad, por citar sólo algunos temas esenciales.

¿Y saben qué? Está funcionando. El Pacto por Tenerife en el Cabildo funciona. Las personas que representan a los partidos políticos son capaces de ponerse de acuerdo en algunos grandes asuntos vitales para nuestros conciudadanos. Ese es el mensaje que estamos transmitiendo a la sociedad: menos espectáculo, más acuerdo, más trabajo y mejores resultados.

No es fácil, pero tenemos mucho que conseguir. El Cabildo ha enviado a todos los parlamentarios por nuestra isla varias enmiendas al proyecto de Presupuestos Generales del Estado en las que se reclama que se incluyan partidas destinadas principalmente a las políticas activas de empleo en la Isla, a la mejora en la depuradora de Santa Cruz y en la terminal del aeropuerto Tenerife Sur, a la rehabilitación del Puerto de la Cruz y al acondicionamiento del litoral, entre otras actuaciones.

Hemos pedido un nuevo Plan Integral de Empleo de Canarias (PIEC) y que se dote financieramente en los presupuestos de 2016, después de la eliminación de esta partida de 42 millones de euros en los dos últimos años, porque creemos que si existe un lugar donde es necesario un compromiso de políticas activas de creación de empleo es en estas islas. Hemos pedido que se dote la aportación anual prometida por el Estado para la rehabilitación del Puerto de la Cruz, cinco millones de euros, que este año no se pagaron. Hemos pedido una nueva terminal para el aeropuerto Tenerife Sur, que se encuentra ya al 90% de su capacidad y en un plazo de entre tres y cinco años estará saturado. Hemos pedido financiación para la rehabilitación de zonas importantes de nuestro litoral, como la playa de Valleseco o Martiánez...

Hemos pedido todo eso y estamos trabajando para conseguirlo. Y para lograr otras inversiones fundamentales del Gobierno de Canarias que se sumarán a las que acometeremos con nuestros propios recursos. Estamos elaborando proyectos y estudios, planificando estrategias de crecimiento, detectando en qué lugares de nuestra Isla es necesario actuar y cómo hacerlo de la mejor manera. Trabajamos para que cada vez más ciudadanos también puedan hacerlo con más y mejores oportunidades. Y lo del espectáculo mejor se lo dejamos a los que creen en los asesores de imagen. "Obras son amores y no buenas razones", decía Fray Luis de León. Que traducido al lenguaje de hoy sería: no me cuentes milongas y enséñame lo que has hecho.

*Presidente del Cabildo de Tenerife