Solo quedan un par de meses para acabar el montaje del documental "Isleños. Una raíz en América", que el cineasta tinerfeño Eduardo Cubillo empezó a gestar hace varios años con la idea de reflejar la historia de las familias canarias que viajaron a Luisiana en el año 1777 y la realidad actual de sus descendientes.

Este proyecto está en proceso de grabación de la banda sonora que ambientará la película, en la que se han embarcado Cubillo y La Gaveta Producciones. Las más de veinte horas de grabación, rodadas en los varios viajes realizados a Luisiana por el equipo implicado en su elaboración, recogen escenas de la recreación de una batalla contra los ingleses en 1812, en la que intervinieron canarios.

También captaron detalles de un Festival de Isleños que se celebra todos los años y entrevistas con destacados personajes de la vida social de Luisiana cuyos ancestros procedían de diferentes pueblos del Archipiélago, entre otros documentos visuales que demuestran cómo doscientos años después una comunidad americana de raíces canarias conserva la cultura y las tradiciones de las Islas.

"Estamos en el proceso de montaje y dentro de dos meses lo terminaremos. Tendrá una duración de sesenta minutos para la televisión, aunque estamos mirando si hacemos también una versión de noventa para el cine. Tenemos mucho material y es una pena no ponerlo. Ya tengo un montaje casi hecho, aunque tengo que meterle algunas cosas", explicó.

La intención de este cineasta, si todo sigue su curso y les dejan, es preestrenar la película los días 18 y 19 de diciembre, en el TEA de Santa Cruz y en el Aguere Espacio Cultural de La Laguna. Después la pondrá en manos de una distribuidora para que la presente en diferentes festivales y televisiones, tanto en Europa como en Estados Unidos.

Otra parte importante del documental es la banda sonora que lo ambientará, cuyo proceso también está muy avanzado. El resultado suena a folk americano, pero con un instrumento canario como el timple y la armónica, muy representativa de Estados Unidos.

"La música ha quedado genial. Ya tengo todas las canciones compuestas y grabadas. Ya hemos puesto la armónica. Vino Scott Billington, productor de blues que cuenta con un Grammy. Está casado con una descendiente de isleños y se mostró muy interesado por el proyecto. Estuvimos dos días grabando en el estudio. Tenemos siete canciones con él. Estoy preparando otras dos para hacerlas con Benito Cabrera".

El documental tendrá una docena de temas en total, en cuya grabación también han participado el compositor y pianista Javier Henríquez de Lara (Feluco), los guitarristas Carlos Arocha y Daniel Toledo, y el pianista de jazz Mark Lomano.

"Suena a folk americano. Todo está con guitarras acústicas y no tiene percusión. Tiene piano y los solistas de armónica y timple. La idea es que el timple no toque con demasiado deje canario, para que se pueda integrar bien, que tenga esa tonalidad, ese rasgueo que lo caracteriza y pueda fusionar con la armónica y la guitarra acústica. La fusión es muy interesante y bastante explicativa de lo que está pasando en el documental", matizó.