PEDIÁTRICA JUBILACIÓN PALMERA

Comienzo en positivo haciéndome eco de la feliz jubilación de uno de los mejores profesionales de la Medicina que conozco. Me refiero al prestigioso pediatra palmero Arturo Méndez Pérez que, hasta hace cinco días, ha sido Jefe del Servicio de Pediatría y Neonatología del Hospital Universitario de Canarias (HUC), a la vez que profesor de Pediatría de la Facultad de Medicina (hoy Ciencias de la Salud) de nuestra Universidad de La Laguna (ULL) y que se jubila al cumplir sus primeros 70 juveniles años. El pequeño gran Arturo Méndez, palmero de nacimiento (hermano del gran Antonio Méndez, nuestro querido y recordado enano Uno con Punto) y tinerfeño de adopción, ha sido (y seguirá siendo) uno de los más grandes especialistas en Pediatría de Canarias pero, sobre todo, una bellísima persona. Si no me equivoco, creo que Arturo Méndez Pérez es el último de los médicos fundadores del Hospital Universitario de Canarias que quedaban en activo y ahora, después de haber estado casi 50 años al pie del cañón, sacando chiquillos y chiquillas adelante, se va a disfrutar de un merecido descanso.

ARTURO MÉNDEZ DEJA EL HUC

Con su jubilación, el HUC pierde no solo a un magnífico profesional, sino a todo un referente. Y es que miles de bebés de Tenerife y La Palma (muchos de los cuales son hombres y mujeres que rondan hoy los 50 años) están vivitos y coleando gracias a la profesionalidad, vocacional dedicación y muchas horas de guardia de Arturo Méndez. Y muchos añorarán las recordadas comidas de hermandad entre los médicos fundadores del HUC, que se celebraban cada año, en gran medida gracias a la iniciativa, voluntad aglutinadora y enorme trabajo de coordinación que siempre hacía Arturo Méndez. Sería todo un detalle que aquellas conciliadoras comidas de hermandad volvieran a celebrarse en el HUC. Otro reto para el nuevo gerente, el doctor Eduardo de Bonis, ya oficialmente nombrado y al que le deseamos mucha suerte. La primera de estas comidas, ya puestos, debería ser como homenaje de despedida al bueno Arturo Méndez, al que le deseamos salud y muchos años de vida.

HASTA LA CORONILLA DE ALARCÓ

Cambiando de tercio (y de médico) tengo que decirles que el culebrón del Partido Popular en La Laguna está más enredado que "Acacias 38". Han pasado solo 105 días desde las pasadas elecciones del 24 de mayo y, de los cuatro concejales que finalmente sacaron los populares, ya tres de ellos están enfadados y enfrentados con el primero. Y es que la número dos de la lista, Susana Fernández Gorrín; el número tres, Orlando Padilla Trujillo, y hasta el cuarto, Iván González Riverol, parece que están hasta la mismísima coronilla del número uno de la misma, el doctor Antonio Alarcó Hernández. Nadie duda de que Antonio tiene muchas cosas buenas, pero, de igual modo, que tiene otro montón de cosas no tan buenas. Y parece que últimamente las segundas están pesando más que las primeras. Creo que hasta el presidente insular del PP, Manuel Domínguez, está también hasta la coronilla del asunto, cosa que se comenta abiertamente en círculos cercanos al presidente, a la vez que consejero del Cabildo y alcalde realejero.

CONGRESO, SENADO... O IGUAL NADA

Lo que sucede (y también no dudan en comentarlo) es que no saben qué hacer con el bidoctor Alarcó. No saben si ponerlo en puestos de salida en la lista para el Congreso de Diputados o en la del Senado de cara a las próximas elecciones generales del mes de diciembre (para las que, si fueran el domingo 20, faltarían 105 días). La duda que tienen radica en que no saben si, hoy por hoy, el aún senador Antonio Alarcó seguiría arrastrando tantos votos como antes o, a la vista de los últimos resultados sacados en La Laguna en las pasadas municipales, la cosa iría a peor. Sea como fuere, lo cierto y verdad es que (aunque públicamente insistan y se empeñen en negarlo) hay un ostensible e insostenible "mal rollo" entre Antonio Alarcó y sus compañeros concejales del PP en La Laguna, así como, igualmente, entre el propio e incansable doctor-doctor y Manuel Domínguez. En menos de tres meses veremos cómo acaba la cosa.

UN TELEVISOR Y 500 EUROS

Tan surrealista y pintoresco está el panorama en el PP lagunero que planta un circo y le crecen los enanos. Hasta han tenido que presentar una denuncia, creo que ante la Policía Nacional, porque alguien entró en la lagunera sede del partido y se llevó un tremendo televisor de plasma, que Susana Fernández valoró el otro día en unos 600 euros, y una caja con dinero en la que, según Orlando Padilla, habría unos 500. Bien es verdad que el ínclito Javier Abreu, primer teniente de alcalde y líder del PSOE lagunero (que está en todo) asegura que en esa caja no podía haber más de 20 euros. Sea el montante total de 1.100 o de 620 euros, lo cierto es que al PP lagunero le han robando algo más que los votos. Supongo que la Policía Científica se está ocupando de la denuncia y no descartará ninguna línea de investigación. Con humor y en plan típica coña lagunera, alguien de los suyos manifestó en la calle Viana: "Los ladrones ya se podrían haber llevado a Alarcó y habernos dejado el televisor de plasma".

LA COHERENCIA DE NUESTRO NICOLÁS

El joven político Nicolás Hernández Guerra de Aguilar, por el momento consejero del Cabildo de Tenerife, que no sé si ya está en el grupo de los "no adscritos" en la nuestra primera corporación insular, llegó a ella no por sí mismo, sino gracias a que la nueva formación política Ciudadanos (C’s) le dio su confianza, le admitió en sus listas y desarrolló una campaña de la que el joven ingeniero informático (que casi no participó en ella) resultó, sin duda, beneficiado. Antes de su nominación como candidato, el propio Nicolás Hernández, en pleno uso de sus facultades físicas y mentales, libre y voluntariamente (y entiendo que responsablemente), firmó la llamada "Carta Ética y Financiera" que Ciudadanos hizo firmar a todos sus candidatos y candidatas. Una carta donde, entre otras cosas, decía textualmente: "Abandonar el cargo público para el que fue elegido en las listas de C’s, y los demás cargos públicos que en su caso pueda ostentar por designación de C’s, en el supuesto de cese de militancia del partido por cualquier causa". Esto, como digo, lo firmó nuestro joven Nicolás. Coherente que es el hombre.

NICOLÁS ME DA... MUCHA TRISTEZA

Por razones que creo son "de peso" político, Nicolás Hernández ha sido expulsado de Ciudadanos, pero él se niega a dejar su insular escaño en el Cabildo de Tenerife, olvidándose de la carta que en su momento firmó y, por tanto, traicionando a Ciudadanos y a sí mismo. El renovado máximo responsable de Ciudadanos en Canarias, con el total apoyo de la ejecutiva nacional del partido, el tinerfeño Juan Amigó Moreno, le ha pedido reiterada y elegantemente a Nicolás que reconsidere su postura y que entregue su acta de consejero, pero parece que el hombre se resiste, dice que de allí no lo mueve ni Dios y piensa seguir como consejero "no adscrito" a ningún grupo político. Uno no puede por menos que pensar que Nicolás Hernández ha perdido su ética (me refiero a la política) y se ha quedado tan alegremente. No sé si por segunda vez (como parece que se dijo en algún WhatsApp) estará pensando en fundar un nuevo partido. Si yo fuera el hijo de Nicolás o el que le viene en camino (que deseo y espero que nazca de maravilla) estaría muy triste por ver cómo mi padre reniega de lo que firma tan pronto y tan fácilmente. A mí no me gustaría tener un hijo "no adscrito". Les confieso que Nicolás Hernández, y sobre todo lo que ha hecho, me da mucha tristeza. Gracias y buen fin de semana.

josecarlosmarrero@elcotarro.com