Ni lo de Santa Cruz, ni lo del Cabildo de Lanzarote, ni siquiera lo del Puerto, Arico, La Victoria, La Guancha, Valle Gran Rey y tantos incumplimientos más sutiles o pactos a la baja habían propiciado lo que sí ha desatado desde el martes la moción de censura en La Frontera, municipio herreño de apenas 4.000 habitantes tras la independencia de El Pinar. No lo habían desembocado, pero, eso sí, quizás la coctelera de todo lo anterior ya lo ha hecho inevitable y se ha llegado a un precipitado punto de inflexión de consecuencias impredecibles. De momento, y según le consta a EL DÍA, en el seno del PSOE canario se ha pasado la frontera, nunca mejor dicho, y ya se asume sin complejos una posible salida del Gobierno regional y una ruptura del pacto en cascada.

Según dichas fuentes, lo ocurrido en La Frontera no se puede desligar del resto de incumplimientos en El Hierro: cabildo, donde AHI-CC pactó con NC, y Valverde, donde el aliado elegido fue el PP. Sin embargo, y más allá de este caso, de lo de Lanzarote y otros incumplimientos, la sensación general en el PSC (Patricia Hernández incluida) es que ya no están dispuestos a seguir centrados en los vaivenes diarios del pacto ni a que la actualidad se limite a estas cuestiones partidistas y no a las prioridades en Sanidad, Servicios Sociales, Educación, Inmigración, Economía, Empleo y demás.

En declaraciones a EL DÍA, el presidente de la gestora del PSOE en Tenerife, Héctor Gómez, y el portavoz parlamentario, Iñaki Lavandera, ahondaron ayer en esa tesis de un análisis global que, eso sí, se centrará, en principio, solo en El Hierro en la mesa del pacto convocada para hoy, desde las 14:30, en Santa Cruz. De hecho, otras fuentes socialistas recuerdan que la situación de la Isla del Meriadiano se dejó fuera de la negociación, por lo que entienden que se descarten medidas disciplinarias. Es más, lo ligan a un eventual cierre de expediente a CC en el Puerto de la Cruz y otros sitios.

En buena parte del PSOE, escuecen los vaivenes continuos y la impresión de que una parte relevante de CC, con Clavijo a la cabeza, no puede disimular sus preferencias por el PP con la paradoja de que, salvo que Casimiro Curbelo quiera, no existe ahora un pacto alternativo a la izquierda en Canarias.

Por supuesto, la interpretación en CC es diametralmente opuesta. Según recalcó ayer a EL DÍA la diputada de CC, presidenta del Cabildo herreño y secretaria de AHI, Belén Allende, lo ocurrido es muy grave, lo achaca a Alpidio Armas y teme que tenga consecuencias graves si no se encauza cuanto antes. En una onda muy similar se expresó el portavoz parlamentario, José Miguel Ruano, quien señaló a este periódico que se trata no de un incumplimiento como los que tratan de arreglar, sino de una clara agresión al pacto de "consecuencias impredecibles" si no se evita la censura.

Una línea casi calcada a la expuesta por el secretario de CC, José Miguel Barragán, el propio Clavijo tras conocerse la censura el martes y consejeras como Rosa Dávila, quienes hablan de "grave incumplimiento" de lo suscrito.

Frente al dramatismo oficial en CC y la resignación crítica en el PSC sobre la situación del pacto tras la censura en La Frontera, hay diputados en ambas formaciones que conciben este episodio como "uno más", como un ejemplo coyuntural de "postureo" partidista y como una supuesta crisis que, en realidad, "es puro paripé". Una escenificación que, por mucho que se eleve el tono o se apunte a consecuencias terminales, quedará en nada tras la reunión de hoy, aunque pueda haber pronunciamientos a corto plazo contundentes y casi de ultimátum. Los defensores de esta tesis, que se dan por igual en CC y PSC, incluso van más allá y no creen que esto ponga en riesgo el pacto o que lo condicione, aún más, a lo que ocurra en las generales.

Según estos diputados consultados por El Día, y más allá de que el PSC fuera o no consciente de lo que pasaría en La Frontera, la situación incluso beneficia a CC porque, con este argumento, podrá aplazar la resolución de "graves incumplimientos" que escuecen al PSOE, como los del Puerto o Arico. De tener alguna consecuencia lo del municipio norteño de El Hierro, estos diputados coinciden en que se traducirá, en tal caso, en la designación del viceconsejero de Relaciones con el Parlamento, pero no pasará nada más. Una lectura que coincide con las que, incluso sin esconder la gravedad de la situación actual, añaden que "esto es política y todo cabe".