La mecánica cuántica describe cómo en el universo pueden darse varios estados de la materia, que en algunos casos se dan al mismo tiempo. Eso da lugar, especialmente en política, a lo que se denomina principio de incertidumbre. ¿Javier Abreu es onda o partícula? Pues vete a saber. Según el día. Está en el gobierno pero sin querer estar. Le obligan los suyos pero en cualquier momento se irá. ¿En qué momento? No se sabe. ¿Tal vez si alguien le ofrece la Alcaldía? Lo pudieron hacer los de Unids (sin vocal, por favor, para no discriminar a nadie) por La Laguna y Nueva Canarias, pero estuvieron racaneándo hasta que se les pasó el arroz.

El resultado de una sociedad inmadura parece ser una vida pública insensata. La sensación de estar instalados en la indefinicion cuántica se expande por el universo político canario. El pacto de gobierno está asentado sobre arenas movedizas. La mitad de los socialistas se lo quiere cargar porque o bien detestan a los nacionalistas o bien quieren cargarse a Patricia Hernández. Y la mitad de los nacionalistas quieren que el pacto sea con el PP porque piensan que van a seguir gobernando este país.

Durante cuatro años, los socialistas de La Palma gobernaron con el PP en varios ayuntamientos de la Isla. Y después en el Cabildo. Y no pasó nada. La materia no se colapsó. En El Hierro, Alpidio Armas, del PSOE, presentó una moción de censura contra Belén Allende y la echó de la Presidencia del Cabildo y tampoco pasó nada. En esta legislatura CC entregó el Puerto de la Cruz al PP y no va a pasar nada. Y José Bermúdez pactó en Santa Cruz con el PP y tampoco va a pasar nada. Nunca pasa nada porque la tradición es que no suceda. La historia de los engaños e incumplimientos en las Islas se remonta al imperio romano.

La entropía incontenible de Abreu, el virus cuántico de Santa Teresa, causante de un estado de vivir sin vivir en sí, ha afectado también a los herreños. Narvay Quintero ya no sabe si es consejero de Clavijo o miembro de la ejecutiva nacional de la AHI o una quesadilla que -tal y como el doctor Jeckyl luchaba contra Mr Hyde- resiste a convertirse en un rosquete lagunero. Es como una partícula subatómica valientemente confusa.

El principio de incertidumbre se expande imparable. Heisenberg estableció que si se colocaba dentro de una caja a un gato con un gas venenoso almacenado de forma inestable, pasado un cierto tiempo el gato estaba vivo y muerto al mismo tiempo. Es como si estuviera describiendo los pactos de gobierno en Canarias, encerrados dentro del aire tóxico de la política regional. Tienen siempre dos estados probables en cualquier momento. Debilitar al Gobierno con la que está cayendo ahora mismo demuestra, eso sí, que no hay estado cuántico en los sesos de algunos socialistas y nacionalistas. Son definitivamente idiotas.