La consejera de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, María Teresa Lorenzo, descartó hoy la posibilidad de aplicar un IGIC reducido a los productos manufacturados en Canarias para atraer visitantes y que el turismo tire de otros sectores, como propuso el PP en el pleno del Parlamento.

En el transcurso de una comparecencia de la consejera sobre la diversificación turística, la diputada del PP Cristina Tavío dijo que no hay mejor manera que incentivar el consumo de productos que bajando su precio, y propuso reducir el IGIC para los productos manufacturados en Canarias como manera de atraer visitantes y aumentar el consumo y el empleo.

Esa sería una manera de que el sector turístico actúe definitivamente como motor de otros sectores de la economía, sugirió Tavío.

La diputada también planteó a la consejera la aplicación de una "drástica inmersión lingüística" en el sistema educativo canario como "la mejor inversión" para evitar que los mejores empleos en el turismo los ocupen foráneos, de manera que a pesar de las cifras récord de visitantes muy pocos puestos de trabajo los ocupan los canarios.

Otra de las propuestas de la diputada del PP fue dejar de "prohibir" segmentos turísticos en auge, capaces de generar negocio, como el alquiler vacacional.

"Somos partidarios de regular" el alquiler vacacional, pero el decreto que aprobó el anterior Gobierno sólo ha generado enfrentamientos dentro del sector turístico, "prohibiendo" modalidades, lo que va en contra de la diversificación, dijo.

Sobre la primera propuesta, la consejera María Teresa Lorenzo descartó una rebaja de impuestos hasta que en un futuro pueda estar garantizada la financiación de los servicios de educación, sanidad y políticas sociales, que son la prioridad del Gobierno.

A la propuesta de la inmersión lingüística no respondió, mientras que en lo referente al alquiler vacacional admitió que "la normativa es mejorable" y dijo que se va a abrir un proceso de diálogo con todas las partes.

También se va a revisar la normativa sobre los impedimentos a nuevos hoteles de cuatro estrellas, aunque no quiso adelantar ninguna solución al conflicto porque se adoptará sobre la base del diálogo y del consenso.

La consejera defendió la idea de que el turismo actúe como motor de otros sectores económicos y de hecho hay ya abierta una mesa de diálogo con el sector primario de la que saldrán propuestas concretas.

María Teresa Lorenzo explicó que sus prioridades para la diversificación turística se centran en crecer en nuevos mercados, para ser menos vulnerables a los vaivenes en los países tradicionalmente emisores, y en nuevos segmentos complementarios del sol y playa, productos nuevos que a su vez generan nuevas actividades económicas y empleos.

"Necesitamos crecer en nuevos nichos con una promoción diferenciada para poner en valor las fortalezas del archipiélago, como el turismo deportivo, el gastronómico, el turismo de viento y olas, el LGTB, congresos, etcétera", dijo la consejera.

Se busca una orientación estratégica hacia nuevas motivaciones del turista, que busca experiencias singularizadas, y hacia la búsqueda de nuevos mercados sin desatender los tradicionales, apuntó la consejera.