Los futbolistas del Tenerife ya se han liberado del peso de no haber ganado esta temporada, pero tienen claro que no pueden conformarse con el paso que dieron en el campo del Llagostera, al que vencieron por 0-2 el sábado pasado.

Desde el vestuario se han encargado de enviar los mensajes oportunos. "Hay que rebajar la euforia", avisó el capitán del equipo, Suso Santana, pensando más en el entorno que en sus compañeros. "Solo hemos ganado un partido de seis y tenemos que estar tranquilos. Si queremos sacar más resultados positivos, habrá que seguir con los pies en el suelo".

El Tenerife recibirá el domingo que viene al decimotercero de la tabla, un Mirandés que tiene solo dos puntos más que el conjunto insular. Lo que parece una oportunidad ideal para dar un salto en la clasificación no se asume por el plantel como una misión sencilla. "Cualquiera te puede ganar", avisó Suso. "Si nos imponemos, nos pondremos por delante en la tabla, pero no hay que pensar en eso sino en salir de la zona de peligro. No es bueno estar ahí abajo".

El extremo blanquiazul destacó la conveniencia de que el equipo se tome ese encuentro como el anterior, el de Palamós. "Para nosotros fue una final. Así nos lo planteamos. No estábamos sacando resultados ni haciendo un buen juego, y los síntomas no eran de estar haciendo bien las cosas. Necesitábamos un cambio radical".

El 0-2, en el que Suso fue protagonista por marcar los dos goles, reforzó la autoestima de la plantilla, pero "un poco, ya que solo es una victoria en seis partidos y hay que tener los pies en el suelo". De momento, el Tenerife se quitó "la losa enorme" que soportó hasta el sábado. Le queda casi toda la Liga por delante.