Solo hay un equipo que marcó más tantos que el Tenerife en las siete primeras jornadas de Liga. En cambio, hay veinte que encajaron menos en el mismo tramo de la temporada. Son datos que sitúan al conjunto que entrena Raúl Agné como el que más relación está teniendo con el gol, ya sea en su be-neficio como en contra de sus intereses.

Los blanquiazules fueron capaces de marcar en seis de los siete partidos disputados hasta la fecha. Solo se quedó sin batir al portero rival coincidiendo con la visita del Real Oviedo al Rodríguez López (0-2), de manera que nunca falló en este apartado en campo contrario. Además, en tres ocasiones logró dos o más dianas a su favor, en los choques con el Numancia (6-3), Mirandés (3-0) y Almería (2-2). En total, el representativo lleva 12 goles, uno menos que el máximo realizador de la categoría, el Numancia, que concentró seis de esos aciertos en un único encuentro, el que le sirvió para derrotar al Tenerife en la primera jornada de Liga.

De esta manera, los blanquiazules avanzan con un promedio de 1,5 goles por partido. De seguir así, cerrará el curso con 63 tantos.

El registro anotador se acerca al que logró el equipo en sus dos últimas campañas en Segunda B (en ambos casos, 13 en los siete primeros partidos), y se queda a tres goles de diferencia del que estableció la escuadra que consiguió el ascenso a Primera de la mano de Oltra (15 en el mismo período).

Pero el Tenerife también está siendo protagonista en su área, y no por tener números de los que pueda presumir. De hecho, es el segundo más goleado de la categoría. A su último rival, el Almería, le va un poco peor. En su descargo conviene recordar que recibió casi la mitad de los tantos que tiene en contra (13 en total) en el famoso 6-3 del 23 de agosto en Los Pajaritos. A partir de ahí, el portero titular, Dani, fue superado en cada compromiso de Liga menos en los correspondientes a las jornadas quinta y sexta (triunfos ante el Llagostera y Mirandés).

Son cuatro goles más en contra que en las dos últimas temporadas en Segunda A y únicamente dos menos que en la que terminó con el descenso a la categoría de bronce en 2011.