Los distintos participantes en la Conferencia Internacional sobre Impunidad en Crímenes contra Periodistas, que comenzó hoy en Costa Rica, coinciden en lo que se denomina "efecto amedrentador de la impunidad" en este tipo de crímenes.

Este efecto es mortal para la libertad de expresión puesto que si atentar contra un periodista sale gratis, solo unos pocos valientes se decidirán a cumplir con su misión informativa.

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), en su jurisprudencia es muy clara al señalar que la impunidad propicia la repetición crónica de las violaciones a los derechos humanos y la total indefensión de las víctimas y sus familiares.

Por ello, el Estado tiene la obligación de investigar, juzgar y, de ser el caso, condenar a los responsables de las violaciones.

Para combatirlo, se comienza por publicitar los datos oficiales de instituciones internacionales como Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) o la CorteIDH, organizadoras del evento.

De esta forma se puede valorar que desde 2006 se registran en el mundo 754 asesinatos de periodistas, de los cuales solo en el 8 % los criminales han sido procesados y solo un 6 % de los casos han sido resueltos.

En 2014, 87 periodistas fueron asesinados en el mundo y en el periodo 2014 y lo que llevamos de 2015 40 periodistas han sido asesinados en Latinoamérica.

La mayoría de los periodistas asesinados fueron por motivos políticos, la segunda causa fue la defensa de los derechos humanos y la tercera las situaciones de guerra.

En la actualidad, hay más de 200 casos de violaciones a la libertad de expresión que han llegado a conocimiento de la Relatoría de Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Datos de la UNESCO indican que en la actualidad solo el 42 % de los países miembros de la organización responde a las solicitudes de información que les ha formulado acerca de los crímenes contra periodistas.

Para frenar el "efecto amedrentador" se sigue por coordinar a las instancias judiciales y regionales en la lucha por la libertad de expresión, punto negro del proceso por el rápido desarrollo de internet y la lentitud de respuesta de las instituciones.

Para el presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Humberto Sierra, este efecto se ve multiplicado por las nuevas tecnologías, por lo que solicitó a los presentes en la Conferencia "más atención a internet, un medio clave y fundamental para la libertad de expresión de los ciudadanos".

La libertad de expresión, según los panelistas, es inherente al desarrollo de la personalidad, por lo tanto es un "derecho universal" y el ejercicio del periodismo no puede ser diferenciado de la libertad de expresión.

Entonces ¿quiénes son los profesionales de la información, quién es el periodista? Para Humberto Sierra es periodista "el que realiza la libertad de expresión de forma continua".

Por ello la protección jurídica absoluta de la libertad de expresión y del derecho a la información es el arma clave para contrarrestar lo que el "efecto amedrentador" realiza en las sociedades.