Hoy se cumplen 100 días de la firma del pacto de gobierno entre CC y PSOE en el Cabildo. A comienzos de la pasada semana, acaso la más polémica de su carrera política, el presidente tinerfeño, Carlos Alonso, se expresaba como sigue sobre un mandato que ha tenido un inicio intenso.

Con lo ocurrido con las carreteras, ¿cómo están ahora mismo las relaciones con Aurelio Abreu y el grupo socialista?

Desde el punto de vista personal, las relaciones son muy buenas. No veo problemas que me lleven a pensar que el pacto no está funcionando.

¿Qué nota se pone?

A mí no me gusta ponerme nota. Quizá en estos meses he estado más reivindicativo que en otras ocasiones, intentando resolver problemas que son muy históricos en Tenerife. Ese es el cambio que he hecho durante el mandato: alzar un poco más la voz para asuntos que considero que tenían que estar resueltos.

El consejero de Sanidad dice que las urgencias tinerfeñas tienen 25 años de retraso. ¿Qué opinión le merecen esas palabras?, ¿será tan beligerante con la sanidad como lo ha sido con las carreteras?

Lo estamos siendo. Y no solo beligerantes, sino contribuyendo a que el Gobierno disponga de fondos para que en Tenerife las cosas mejoren. Esto que dice el consejero yo lo comparto. Y da la razón a que la inversión en Tenerife se tiene que reforzar en materia sanitaria, a lo que nosotros vamos a ayudar todo lo que podamos. Nos parece que se trata de uno de los problemas capitales de la Isla.

¿Cómo analiza el proceso de privatización de los casinos y la contestación que ha tenido esta decisión?

Es un asunto que para mí está bastante claro: una administración no debe estar operando el juego; una institución local no ha de tener casinos por rentables que sean. Cuidaremos que los trabajadores mantengan sus condiciones labores, como se especificó en el pliego anterior.

¿Cómo va el proceso de desinversión en empresas insulares?

Ya está prácticamente terminado en el caso de Buenavista Golf, donde vamos a arrendar las instalaciones del campo al hotel Nueva Isla Baja. Con Litografía Romero nuestra intención sigue siendo la venta, pero a un proyecto industrial. Después están los casinos y la reorganización de las participaciones conjuntas con el Gobierno de Canarias en el caso de Gestur, Polígono de Granadilla e Imetisa.

Tras lo que ha pasado con las carreteras, ¿considera más importante los trenes?

No; lo que ocurre es que uno tiene que actuar a corto, medio y largo plazo. Hoy por hoy, la urgencia es aumentar la capacidad de los corredores de transporte por carretera. Pero seguimos sin renunciar a que la solución definitiva venga, como ocurre en otros sistemas muy congestionados como el nuestro, por el uso del transporte ferroviario.

¿Le preocupa el retraso del concurso de conservación de carreteras?

Es un concurso complejo, y estas cosas hay que hacerlas bien para evitar recursos. Se le ha dado un plazo razonable a los servicios técnicos para que lo concluyan antes de que termine el año. Las carreteras están mantenidas, no es un problema de servicios.

¿El recurso presentado por CCOO en relación al proceso de delegación del Parque Nacional del Teide puede retrasarlo?

Es un tema que tiene que resolver la Comunidad Autónoma. Por ahora, no me han transmitido ninguna preocupación en referencia a esta cuestión.

En el último pleno volvió a haber un encontronazo con Podemos. ¿Cómo está viendo el papel de esta formación en el Cabildo?

Es un grupo que piensa que son los únicos que tienen la voz de los ciudadanos. Tan representantes son ellos como el resto de consejeros que están en el pleno. Fuera de esas cuestiones más bien formales, Podemos se ha incorporado a una dinámica de consenso en el Cabildo de Tenerife.

¿Cuál es su pronóstico para CC en las elecciones generales?

Tenemos que salir a intentar repetir los resultados que tuvimos en las elecciones locales. Se pueden criticar e incluso hay quienes dicen que son malos, pero con ellos podremos tener la posibilidad de lograr dos diputados en Tenerife y uno en Las Palmas. Esos serían unos resultados muy positivos en estos comicios.

Hay quienes dicen que usted está deseando que gane el PP para que haya un pacto con ellos...

A diferencia de lo que ocurre en otras instituciones, en el Cabildo podemos oscilar hacia un lado o hacia otro sin mayor problema. Eso hace fuerte al Cabildo. No tengo necesidad de elegir; lo que necesito es que la institución insular sea fuerte y que contemos con apoyo del Estado y del Gobierno de Canarias. Realmente no me preocupa qué va a pasar en el Cabildo a partir de las elecciones del mes de diciembre porque, con cualquiera de los dos resultados, creo que nosotros vamos a estar bien posicionados.

¿Qué le parecen las críticas hacia su relación con el PP y Manuel Domínguez?

Pero es que, si el Partido Popular, igual que Podemos, quiere trabajar por Tenerife, le tengo que abrir la puerta... Ese es el chip distinto que tenemos en el Cabildo.

¿Cómo valora el inicio de mandato de Fernando Clavijo?

Ha conseguido darle la vuelta a un escenario de confrontación y frustrante con una apuesta de diálogo e ilusión.