Cuando todos pensaban que no había nada más que llevarse del edificio de la Mesa Mota, el tiempo ha puesto en su sitio al incrédulo, y es que hace unos días unos desconocidos desarmaron la pérgola que daba la bienvenida al "inservible" inmueble que corona la atalaya lagunera para llevarse los cables de acero.

Lo cierto es que pasa el tiempo y el inmueble, que el Ayuntamiento de La Laguna quiso convertir en uno de los puntos de encuentro del municipio y que hasta el momento se constituye en un museo de la desidia constructiva, se sigue deteriorando por todas partes.

Durante los últimos meses ha sufrido varios asaltos y los gamberros o amigos de lo ajeno han convertido el interior del edificio en "zona de guerra" por los continuos destrozos producidos.

Justamente cuando el área de Medio Ambiente está acometiendo las actuaciones de rehabilitación del área recreativa que se encuentra en el ámbito de la edificación, en la que operarios de una empresa contratada está realizando tareas de reposición del mobiliario, hace unos días se alertó de que la estructura que se encontraba en el patio de entrada del edificio había desaparecido.

Y es que las "velas" de esta estructura vanguardista se encontraban en el suelo porque los cables de acero desaparecieron. Al instante se dio parte y operarios del ayuntamiento recogieron los adornos y echaron al suelo las estructuras, que quedaron en el suelo a la espera de que "algún chorizo rompa la valla de entrada de noche cuando nadie se entere, logre subir con un pequeño camión y desarmen los pilares de las velas y se los lleven para hacer negocio en alguna chatarrería", dijo un asiduo caminante indignado.