Dani Hernández ya es el único jugador del CD Tenerife que ha disputado los 810 minutos del presente Campeonato. El último en caer de la lista fue Vitolo, sustituido en el tramo final (83'') del encuentro con el Zaragoza. En las estadísticas suele darse esta circunstancia si los porteros tienen continuidad. "Eso dicen, que o juegas todo o no juegas nada, pero creo que Roberto y yo se lo ponemos difícil al míster. Ahora tengo la suerte de ser yo el que está ayudando desde dentro del campo", cuenta el hispano-venezolano con humildad.

Aunque no le da demasiada importancia a este liderazgo, sí se siente "agradecido por haber podido jugar todos los minutos y con ganas de seguir trabajando para que se mantenga". No ha sido su mejor tramo de competición, puesto que acumula más de un error en estas nueve jornadas. Pero lo peor ha pasado. "Esos partidos nos hicieron más fuertes. Quizás se habían generado unas expectativas muy altas. Creo que esa experiencia nos debe hacer más fuertes. No podemos olvidar ese inicio para no repetir errores del pasado", valora.

Después de 29 partidos como titular en el Tenerife, Hernández no se considera dueño del puesto ni protagonista de nada. "Trato de ayudar al equipo en lo que pueda, pero lo mejor es que el portero no intervenga mucho. Eso quiere decir que nos crean pocas ocasiones y que estamos jugando en campo rival", resume antes de colocar el interés colectivo por delante del apartado individual. "No es bueno cuando el equipo juega bien y no gana. Queremos hacer las dos cosas, pero tenemos que seguir trabajando", apunta como reto.

En lo individual, el suyo será frenar al exblanquiazul Nino, que está en un gran momento. "Él vive en racha, siempre está haciendo goles. Los que somos de aquí lo conocemos y tenemos un gran recuerdo de él. Trataremos de que tenga la menor cantidad de opciones", dice como idea para que el líder Osasuna siga sin tener éxito en el Heliodoro.