En la madrugada de ayer pudo ocurrir una tragedia en un conocido restaurante de La Estrella del Sur, una pequeña urbanización situada cerca de El Fraile, en Arona.
Tres ladrones y el propietario del local se agredieron mutuamente en un nuevo asalto a dicho establecimiento, concretamente el noveno de los robos sufridos por el empresario en apenas cuatro meses.
El dueño del guachinche pernoctaba en el interior y a las dos y media de la madrugada oyó ladrar al perro. Supuestamente, eso ocurrió antes de que al can le suministraran un tranquilizante.
El empresario afectado, de origen sudamericano, se levantó y se dirigió hacia una puerta, por la que ya se había colado el primero de los ladrones, que iban encapuchados. Entre ambos se inició un forcejeo y posteriormente entraron otros dos delincuentes, mientras que el cuarto se quedó en el exterior. La víctima de los diferentes robos con fuerza lanzó sillas, platos y todo lo que tenía a mano.
A uno de los ladrones se le cayó la bolsa en la que llevaba las herramientas, entre otras una cizalla y cuerdas.
Al parecer, los ladrones sufrieron heridas sangrantes, como prueban los restos que quedaron en el suelo del local.
El empresario manifestó ayer a EL DÍA que "el perro empezó a ladrar, a pesar de que le dieron un tranquilizante, y saltó la alarma". Recordó que en los dos asaltos previos, el citado can mordió a uno de los ladrones, al menos, y el animal fue golpeado en la nariz. Eso supuestamente motivó que el perro fuera sedado ayer.
El empresario afectado dijo que los ladrones "iban encapuchados, con linternas y herramientas, como una cizalla, una patacabra y una sierra".
Reconoce que, tras un forcejeo, golpeó a los delincuentes con las mismas herramientas que traían, así como con cuchillos, platos o sillas.
En cualquier caso, él también sufrió lesiones en la cabeza, los brazos y las piernas, según relató ayer.
Los autores del delito huyeron en coche por la carretera hacia El Fraile y Las Galletas.
Hasta el lugar acudieron patrullas de la Policía Local y de la Guardia Civil, que se hizo cargo de la investigación del asunto.
En otras ocasiones, los ladrones se han llevado dinero en efectivo, bebidas alcohólicas, carne y un ordenador, entre otras cosas.
Además, en todas las ocasiones generaron cuantiosos daños materiales.